Publicado 15/11/2024 08:00

Julia Navarro.- Y ahora ¿qué?

MADRID 15 Nov. (OTR/PRESS) -

Mientras Donald Trump va desvelando quiénes le acompañarán durante su nuevo mandato como Presidente, entre ellos el controvertido e inquietante Elon Musk, en los medios periodísticos norteamericanos, también en los europeos, continúan los análisis y lamentos por su triunfo.

Me parece a mí que esos lamentos no van a ninguna parte, sino que la pregunta que hay que hacer es ¿por qué ha perdido el Partido Demócrata?. Hasta que los líderes de este partido no hagan está reflexión y analicen las causas de su derrota no saldrán del "bucle" de las lamentaciones.

En mi opinión, la derrota de los demócratas, se debe a que buena parte de los norteamericanos sienten que el Partido Demócrata, ni siquiera se molesta en buscar respuestas a sus problemas y preocupaciones. Los demócratas han elegido otras batallas, otros objetivos que una buena parte de los ciudadanos norteamericanos no sienten como suyas.

Y es ese abandono de las clases trabajadoras y de sus problemas reales lo que ha llevado en Estados Unidos, y hace ya algún tiempo en Europa, a que partidos "populistas" y extremistas se hayan ido abriendo paso consiguiendo tener una presencia sustancial.

Ese es el problema, que la socialdemocracia y partidos afines han dado por hecho e inalterable el "estado del bienestar" y han buscado otras causas. Pero el "estado del bienestar" se tambaleó con la crisis del 2008 y desde entonces no ha dejado de hacerlo,mientras tanto los partidos tradicionales, que antaño, buscaban dar respuesta a los problemas reales de la sociedad, se han ido alejando de la búsqueda de solución a esos problemas.

Así que son los partidos socialdemócratas y liberales los que han abandonado a los ciudadanos provocando que se abriera una brecha para dar paso a los populismos.

Trump es una consecuencia más de ese abandono del partido Demócrata a sus votantes tradicionales a los que no ofrece ninguna solución a sus problemas.

En Europa vemos con preocupación y estupor como partidos de corte ultraderechista pero también de un izquierdismo rancio adquieren cada vez una presencia más determinante.

La realidad es la que es y es que los problemas de la inmensa mayoría de los ciudadanos siguen demandando respuestas a los problemas cotidianos. Y si no encuentran esa respuesta en los partidos socialdemócratas y liberales pues la buscan en otra parte. Así de simple y así de desolador.