Actualizado 04/12/2015 12:00

El Abanico.- El mundo de la cultura se rebela contra Rajoy

MADRID 4 Dic. (OTR/PRESS) -

Estamos en vísperas electorales, un buen momento para hacer reivindicaciones, sobre todo si como parece los partidos no andan tan sobrados de votos como les gustaría. De ahí que el mundo de la cultura le haya dado un toque de atención a Rajoy, después de tres años luchando para que el gobierno baje el IVA, que gracias a Montoro anda ya por el 21 por ciento. Una barbaridad, teniendo en cuenta la crisis que atraviesa el país, pero este sector en particular. Nada desdeñable si tenemos en cuenta que da de comer a unas 500.000 familias, no todas de izquierdas por supuesto, pero sí lo suficientemente decisivas en el caso de que opten por no votar al PP, preocupadas como están por el presente y el futuro de los suyos pero también de una industria que por no se sabe qué extraña razón se le ha atravesado al ejecutivo desde que muchos de sus representantes se posicionaran con el "no a la guerra". Una postura tan legítima como cualquier otra si no fuera porque Mariano Rajoy está convencido de que fue una de las razones de que perdieran las elecciones del 2004.

Tres cartas tres han enviado al presidente del Gobierno sin que este se haya dignado contestar a ninguna de ellas, tal y como ha denunciado Jesús Cimarro, presidente de las asociaciones teatrales, quién además ha asegurado que solo el PP no tiene en su programa electoral la reducción del IVA cultural. Una actitud que sorprende porque si algo debería saber un político de larga trayectoria como Rajoy es que una vez que llega al gobierno es prioritario que gobierne para todos los ciudadanos y no solo para sus simpatizantes. Una práctica muy poco democrática por cierto.

Jugar con el pan de sus hijos y la estabilidad de sus familias no es algo por lo que estén dispuestos a pasar actores, directores, músicos, cantantes, bailarines, y en general todos aquellos que viven de su trabajo, tal y como ha declarado Pascual Egea, representante del sector musical.

Es la primera vez que representantes de las 7.000 empresas del sector se ponen de acuerdo para luchar por lo que consideran un injusticia. De ahí que hayan grabado un video titulado "España y nosotros, mira la diferencia" que se emitirá en cines y a través de Internet con el fin de denunciar que España tiene los impuestos más gravosos de toda Europa. Un video que puede no gustar a algunos pero sí a todos aquellos que por una u otra razón se sienten agraviados con el Gobierno del PP. Gente de toda condición a quienes los cantos de sirena de Pablo Casado no parecen convencerles lo más mínimo. Entre otras razones porque pese a que es cierto que la economía está empezando a despuntar, también lo es que hay miles de personas que se quedaran en la cuneta, formando parte de esa legión de excluidos sociales de los que nadie quiere hablar, convirtiéndoles en los "invisibles" del sistema.

Juan Ramón Gómez Fabra, presidente de la Federación de cines, calcula que la bajada de la recaudación de las taquillas alcanza el 25%, y un 35% en la música en directo. Una barbaridad a nivel económico y un desastre por lo que significa para la cultura de un país como España, tan necesitado de gente que reflexione, porque eso es al final lo que representa la cultura, libertad, libertad para elegir, para votar, para formar a quienes vengan después de nosotros. ¿O alguien imagina lo que hubiera sido de las letras españolas sin un Cervantes, un Unamuno, un Juan Ramón Jiménez o un Antonio Machado?. O sin directores de cine de la talla de Luis García Berlanga, Luis Buñuel, Pedro Almodóvar o Amenábar, por poner solo algunos ejemplos, de los que estoy segura todos y cada uno de nosotros nos sentimos orgullosos.