MADRID, 14 Dic. (Portaltic/EP) -
Un 15 por ciento de los españoles admite que vigilaría digitalmente a su pareja, a través de aplicaciones destinadas a estos usos, sin el consentimiento de estas, mientras que el 9 por ciento reconoce haber instalado alguna en el teléfono de sus compañeros sentimentales.
Así lo revela un estudio, reciente elaborado por SAPIO Research a petición de Kaspersky y varias ONG que trabajan en el área de la violencia doméstica, que la empresa de ciberseguridad ha emitido a Europa Press. Con este, se busca conocer la presencia del 'stalkerware' y el modo en que se puede mitigar su impacto tóxico en la sociedad.
Para llevarlo a cabo, se ha realizado unaa encuesta entre 21.055 personas de 21 países que actualmente tienen una relación o la han tenido en el pasado. De ellas, 1.004 participantes son de España.
Para poner de manifiesto cuál es la extensión de este fenómeno, también llamado
'spouseware', la investigación parte de la necesidad de conocer
cuál es el porcentaje de encuestados que conocen el término.
Se trata de un 'software' espía utilizada para conocer los movimientos de un individuo a través de su teléfono móvil y acceder a detalles como la información que ven, los usuarios con los que mantiene contacto y sus conversaciones o lo que buscan en Internet.
Partiendo de este informe llamado 'Acoso digital en las relaciones', el 54 por ciento de los encuestados no conoce este término, frente al 46 por ciento que sí afirma saber qué es. Desde Kaspersky señalan que aquellos que están familiarizados con este término presentan distintos niveles de conocimiento sobre sus funcionalidades.
De este modo, el 72 por ciento de los participantes españoles en esta encuesta saben que con estas aplicaciones se puede registrar la ubicación, el 69 por ciento que es posible controlar la actividad en internet y el 63 por ciento, realizar grabaciones de vídeo y audio.
No obstante, los disminuye el porcentaje de usuarios que sabe que estas 'apps' pueden avisar al acosador si una víctima intenta desinstalarlo (un 31 por ciento), mientras que el 29 por ciento de ellos desconocen que exista una función para enviar una notificación cuando el usuario llega a casa. Además, el 33 por ciento desconoce que se puede acceder a las claves del registro.
SIN CONSENTIMIENTO NI CONOCIMIENTO
Uno de los aspectos sobre los que se pone el foco en este estudio es aquel que se refiere al consentimiento de esta vigilancia en el ámbito dital en la unidad de la pareja.
Del total de los encuestados, el 37 por ciento no tendría inconveniente en vigilar la actividad de su pareja siempre que ésta le haya dado su consentimiento. No obstante, el 6 por ciento considera correcto controlar los movimientos de su compañero o compañera sin su conocimiento.
Expertos consultados por el equipo que ha realizado este informe han indicado que los maltratadores que admiten utilizar estas aplicaciones justifican este acoso y el uso de ellas por cuestiones como la preocupación por la seguridad de su pareja.
Así, casi dos tercios de las personas que consideran que es correcto controlar a su pareja lo harían ante sospechas de infidelidad (69%) o por la seguridad de su compañero o compañera sentimental (63%). Es más, el 62 por ciento de ellos lo haría ante la creencia de que su pareja pudiera estar implicada en un delito.
Otro de los datos que revela este estudio se refiere al procentaje de personas que reconocen haberle pedido a su pareja que instale una aplicación de vigilancia (9%), mientras que el 5 por ciento admite haber instalado por su cuenta este tipo de 'software' en el móvil de esta.
EL 22% HA RECIBIDO ACOSO POR MEDIO DE LA TECNOLOGÍA
El acoso digital es un problema que afecta a gran parte de la sociedad, aunque son más las mujeres víctimas de este espionaje por 'software' que hombres. Este informe apunta que una de cada cuatro personas encuestadas, un 22 por ciento del total, reconoce haber sufrido alguna forma de acoso por parte de sus parejas.
Por otra parte, el 19 por ciento de los encuestados en España asegura que ha recibido acoso por medio de la tecnología al menos una vez y el 16 por ciento sospecha que su pareja le ha espiado a través de una aplicación de seguridad.
Según arroja la muestra, la privacidad digital es una de las principales preocupaciones de los usuarios, ya que al 38 por ciento le inquieta que su pareja viole su privacidad digital. La mayoría de las personas que muestran esta intranquilidad son jóvenes.
MÁS DE LA MITAD CONOCE LA CONTRASEÑA DE SU PAREJA
En relación a la información a la que tienen acceso los usuarios con respecto a los dispositivos de sus parejas, el informe determina que el 55 por ciento de los encuestados en España ha compartido la contraseña de su teléfono con su pareja, mientras que una proporción similar, el 54 por ciento, conoce estos dígitos.
A pesar de que para el 38 por ciento es normal compartir con sus familiares los datos de inicio de sesión de iCloud y Google, para revisar imágenes y otros archivos, el 33 por ciento recalca que nunca compartiría las contraseñas con su pareja. De ese porcentaje, solo una cuarta parte (25%) compartiría la geolocalización, el historial de navegación (24%), los mensajes de texto (22%) o la información pago (22%).
Por otro lado, la manipulación de los 'smartphones' es otro de los aspectos que se destaca en la investigación, ya que el 88 por ciento de los encuestados no permite que sus parejas instalen o configuren sus dispositivos.
Además, el 86 por ciento se enfrentaría a su pareja si descubriera que esta hubiera instalado una 'app' de vigilancia en su móvil sin su consentimiento, pero un 27 por ciento considera que no serviría de nada discutir por este asunto.
Independientemente de si este tema genera discusión entre dos personas, el 50 por ciento de los encuestados afirma que, de saber que existe este tipo de control, borraría ella misma la aplicación del dispositivo y el 49 por ciento indagaría para averiguar quién ha sido la persona que la ha descargado.