MADRID, 21 Mar. (Portaltic/EP) -
A pesar de que mayoritariamente los videojugadores españoles están concienciados sobre los riesgos de Internet, muchos fallan tanto a la hora de crear contraseñas como de guardarlas, hasta el punto de que más de la mitad tiene prácticas de riesgo como repetir contraseñas en distintos servicios digitales.
Los ataques web dirigidos a la industria del videojuego aumentaron un 340 por ciento en 2020, según los datos de Akamai sobre la actividad criminal dirigida a este sector. Un dato que pone sobre la mesa la vulnerabilidad del mundo 'gaming' como objetivo de los cibercriminales.
Estos riesgos son conocidos por los jugadores españoles. Según se recoge en un estudio de Esports City League y la firma de seguridad informática ESET, el 84,7 por ciento de los encuestados comprende que pueden robarle dinero a través de un videojuego, ocho de cada diez saben que comprar juegos en tiendas no oficiales es peligroso y el 93,75 por ciento tiene en cuenta que pueden suplantar su identidad a través de una estafa 'online'.
Además, nueve de cada diez jugadores saben que es recomendable mantener los dispositivos actualizados y conocen el valor del doble factor de autenticación, mientras que para el 86,4 por ciento es recomendable contar con un antivirus o protección extra.
Este conocimiento contrasta con la práctica: más de la mitad de los 'gamers' españoles repite contraseñas en sus diferentes cuentas y un tercio utiliza contraseñas cortas, con referencia a datos personales o utilizando términos que le resultan familiares, a pesar de que los expertos recomiendan que sea una sucesión completamente aleatoria de números, símbolos y letras, incluyendo mayúsculas y minúsculas.
A la hora de guardar las contraseñas, uno de cada cuatro las comparte con familiares o amigos y el 21,3 por ciento las guarda en un Word, con el riesgo que conlleva. Además, los expertos recomiendan cambiar las contraseñas cada cierto tiempo, algo que el 42,7 por ciento de los jugadores españoles no hace o lo hace en pocas ocasiones.
"Hace tiempo que los delincuentes tienen a los 'gamers' en su punto de mira y el robo de credenciales es una de sus acciones favoritas porque les permite robar, de forma relativamente sencilla, el acceso a su biblioteca de juegos, suplantar su identidad e incluso hacerse con la información de pago", ha señalado el director de investigación y concienciación de ESET España, Josep Albors.
Por ese motivo insiste en un comunicado en que "es indispensable que los 'gamers' también gestionen de forma segura sus credenciales, usando las herramientas que tienen a su alcance y añadiendo capas de seguridad que hagan más difícil este robo de credenciales".