MADRID, 13 Ene. (Portaltic) -
Las compañías están en su derecho de monitorizar las comunicaciones privadas de sus empleados durante el trabajo, según ha determinado un juzgado europeo de derechos humanos, tras el caso de un despido en Rumanía por este motivo.
Un ingeniero fue despedido en Rumanía en 2007 después de que su compañía descubriese que chateaba con su novia y su hermano a través de Yahoo Messenger, herramienta que también utilizaba con fines profesionales.
De esta forma, los empleados deberán tener cuidado a partir de ahora para que sus comunicaciones privadas en el trabajo no afecten a su productividad y eso sea motivo de despido porque la justicia europea ha determinado que las compañías están en tu derecho de monitorizar estas conversaciones y determinar si afectan al rendimiento.
En este sentido, la empresa rumana que despidió al empleado había determinado previamente y de forma expresa que sus trabajadores no podían utilizar esta aplicación de mensajería con fines personales.
En este sentido, según recoge The Guardian, la corte europea de derechos humanos desestima que la empresa haya violado la privacidad del trabajador, ya que considera "razonable que un empleador quisiera verificar que los empleados estaban completando sus tareas profesionales durante el horario laboral".
En este sentido, y esta es la clave de este asunto, la compañía monitorizó conversaciones privadas, pero a través de una aplicación en primer lugar destinada a fines profesionales y durante la jornada laboral, pensando que encontraría comunicaciones profesionales.
En este sentido, el juzgado ha admitido estas conversaciones privadas como prueba de que el trabajador utilizaba "el ordenador de la empresa para sus propios fines personales durante horas de trabajo".
En este sentido, el juzgado también considera que tiene que existir un "balance justo" entre el respeto a la privacidad del trabajador y los intereses del empleador.