MADRID, 21 Jun. (Portaltic/EP) -
Lenovo ha fabricado y distribuido un millón de estaciones de trabajo y servidores desde sus instalaciones de producción construidas a medida en Europa, tras poco más de un año de su puesta en funcionamiento en Budapest, Hungría.
La planta de Lenovo en Budapest abrió en junio de 2022 para dar soporte a clientes de toda Europa, Oriente Próximo y África (EMEA) y responder a las necesidades de infraestructura de servidores, sistemas de almacenamiento y estaciones de trabajo PC de alta gama.
A fecha de junio de 2023, la fábrica ha proporcionado soluciones a más de mil clientes de 69 países, al tiempo que su escala y ritmo de operaciones se han acelerado a lo largo del último año, como ha indicado la compañía en una nota de prensa.
Esta fábrica ha permitido a la firma tecnológica distribuir un millón de unidades, una cifra que representa "una muestra de la colaboración interna y externa" que en este último año ha habido entre empleados y clientes, como ha apuntado el responsable de Fábrica de Lenovo, Szabolcs Zolyomi.
"Hemos sido capaces de responder a las necesidades de los clientes de forma más efectiva, con mayor eficiencia y control sobre el desarrollo de los productos y las operaciones de la cadena de suministro, y todo ello mientras hemos seguido manteniendo nuestro compromiso con la sostenibilidad y apoyando a la comunidad local", ha añadido el directivo.
Lenovo explica que construyó las instalaciones de fabricación de Budapest pensando en la sostenibilidad y desde su inauguración se ha mejorado el aislamiento térmico, completado la instalación de sistemas sensores de iluminación y optimizado la utilización del calor residual de los compresores de aire.
La fábrica de Hungría forma parte de la red de producción global de Lenovo, distribuida entre 35 ubicaciones de ocho regiones para dar servicio a clientes en 180 mercados, incluyendo Argentina, Brasil, China, Hungría, India, Japón, México y Estados Unidos.
Desde ella ha proporcionado capacidades añadidas a los clientes que operan algunos de los mayores superordenadores de Europa, entre ellos se incluye el Centro de Supercomputación de Barcelona en España, el Centro de Supercomputación de Leibniz en Alemania y SURF en Países Bajos.