MADRID, 28 Oct. (Portaltic) -
En general, hay una pregunta en el aire que muchos se hacen: ¿debe preocuparse Apple por su excesiva dependencia del iPhone? El motivo es que el 60 por ciento de la facturación total de la compañía en su último trimestre provienen del famoso teléfono.
La respuesta es "sí" y "no". Por un lado, es cierto que el peso del teléfono en los resultados de Apple es abrumador, lo que podría presagiar un batacazo en futuros trimestres fiscales, si las ventas del iPhone se estancasen.
No obstante, el iPhone aún tiene mucho margen de crecimiento. En China, por ejemplo, está comenzando a ganar muchísimo peso. En mayo de este año, por ejemplo, saltó a la cabeza de los fabricantes en el país asiático con un 14,7% de la cuota en el mayor mercado mundial.
Apple se está haciendo fuerte en China y está claro que aún tiene un margen de crecimiento enorme allí. En este sentido, cada décima de cuota ganada en un mercado tan masivo puede suponer cuantiosos ingresos en un teléfono con un precio tan elevado, que deja buenos márgenes a Apple.
Y no es el único territorio. En Europa, por ejemplo, aún hay mucho terreno que ganar. Miremos a España, sin ir más lejos. En nuestro país aún domina la presencia de Android de forma aplastante, con cerca del 90 por ciento de cuota de mercado. No sería extraño que la veamos crecer en los próximos años.
¿Qué invita a pensar que Apple podría seguir robándole terreno a Android en todo el mundo? Precisamente, los resultados del último trimestre. En su último cuarto, la compañía de la manzana ha vendido 14,4 millones de teléfonos a usuarios que venían del ecosistema de Google. Nada menos que un 30 por ciento de los nuevos iPhones vendidos.
Es decir, que al iPhone aún le queda mucha cuerda. No parece que sea un producto que se vaya a estancar, al menos de momento. Además, es evidente que Apple es consciente de esta cuestión y está trabajando para remediarlo. También del estancamiento del iPad.
Ante esta realidad, la entrada de Apple en el terreno de la relojería tiene más sentido que nunca. De momento la compañía no ha revelado las cifras de ventas del Apple Watch (lo cual, es cierto, no es un buen indicativo), así que habrá que esperar un poco más para saber si está funcionando. Los Mac también mantienen un crecimiento pequeño, pero sólido.
Además, se han lanzado recientemente (y aún no en todos los ecosistemas ni países) Apple Music y Apple Pay y habrá que darles algo de tiempo. La compañía, además, está reforzando su presencia en el mercado de la televisión con el nuevo Apple TV, al que veremos llegar también nuevos servicios, aplicaciones y videojuegos.
En resumen: ¿tiene Apple motivos para preocuparse por su dependencia del iPhone? Nosotros creemos que no, de momento. Apple está trabajando para que el teléfono siga creciendo y de momento ya ha sentado las bases y aún tiene margen para contar con nuevos productos estrella.