Google Pixel Watch 3 junto a los nuevos 'smartphones' de Google, Pixel 9 y Pixel 9 Pro XL - EUROPA PRESS
MADRID, 12 Oct. (EDIZIONES/Portaltic) -
Google Pixel Watch 3, disponible en España desde mediados del pasado agosto, no ha llegado con novedades destacadas en relación a su aspecto, aunque sí ha demostrado dar el esperado salto a nivel de autonomía, ya que esta vez sí que se extiende más allá de las 24 horas, aunque sigue siendo un problema a destacar de un dispositivo del que esperábamos más.
Los nuevos relojes inteligentes de la marca son prácticamente iguales en aspecto a sus predecesores, con cuerpo circular, cristal curvado y una correa deportiva de silicona con un revestimiento suave al tacto. Esta se coloca con el mismo procedimiento que en los Pixel Watch 2, con un anclaje sencillo y muy estético.
No obstante, lo más interesante de esta tercera generación es que ofrece dos tamaños, ya que a los 41 mm de las versiones anteriores, se añade un segundo, de 45 mm. Esto da una opción extra a los usuarios con las muñecas más grandes, a quienes el formato más pequeño les queda ridículo. Ambas variantes, además, se ofrecen con WiFi o LTE, lo que también hace que su precio varíe.
En caso de querer hacerse de una vez con los últimos dispositivos presentados por la marca, conviene decir que el de 45 mm no incluye el modelo con caja de aluminio en color plata y correa deportiva rosa cuarzo, de modo que no se puede combinar con el Pixel 9 elegido en ese color.
Si bien se diferencian por su peso (31 gramos el de 41 mm y 37 gramos el de 45 mm), comparten las mismas características, empezando por la pantalla Actua AMOLED a 320 ppp con cristal personalizado 3D Corning Gorilla Glass 5 y un pico de brillo de 2.000 nits. Esto es notorio sobre todo en espacios abiertos y con luz solar directa, ya que el panel se ve con mucha claridad.
Si del anterior modelo comentábamos que su pantalla estaba mal aprovechada debido a los amplios márgenes que ofrecía, lo que más destaca de este otro es, precisamente, un cambio en su 'software', ya que la nueva versión Wear OS 5.0 muestra la interfaz con un fondo negro constante, de manera que el rango de lo que se ve parece incluso más amplio de lo que realmente ofrece. Su grosor real, no obstante, se demuestra al hacer 'scroll' entre las notificaciones, cuando nos podemos cerciorar de que los borde siguen siendo demasiado amplios.
En cualquier caso, la interfaz tiene un diseño más útil y vistoso, además de que se puede navegar por ella tanto a través de la pantalla táctil y de los botones laterales como de su corona giratoria, que muestra los distintos menús disponibles sin tener que "manchar" de huellas el panel. Esto es especialmente útil durante una sesión de ejercicio.
AMPLIA BATERÍA, AUNQUE SIGUE SIENDO LIMITADA
En cuanto a su batería, que tiene una capacidad de 307 mAh en el modelo que hemos probado (420mAh en el de mayor tamaño), dura día y medio como mucho, algo más que Google Watch 2, siempre que no se ponga el modo Always on Display (AOD) y su uso no sea excesivo.
Cargarlo no es que sea difícil, pero sí que obliga a tener en cuenta la posición del dispositivo, ya que el cable se sitúa en el lado de la corona. Eso, al contrario que otras marcas, que solo basta con colocar el 'smartwatch' sobre la base para que comience a cargarse. Tampoco nos termina de convencer que el cable sea USB-C: quienes tengan adaptadores de corriente más antiguos, con USB, se verán en la necesidad de cargar su 'smartwatch' con un ordenador.
Los tiempos de carga también se reducen en comparación con la anterior generación, pero esto se nota principalmente cuando se carga de 0 a 100, ya que hacerlo no supera la hora, cuando a Pixel Watch 2 le llevaba casi 75 minutos completarla. En cualquier caso, que sea necesario cargar el dispositivo cada tan poco tiempo nos sigue pareciendo un atraso, aunque no es algo exclusivo de Google, ya que otros de los 'wearables' que hemos probado en Portaltic han mostrado limitaciones similares.
Lamentablemente, no hemos tenido la oportunidad de conocer cómo funcionan las características enfocadas a la actividad física y al 'fitness' impulsadas por Inteligencia Artificial (IA) de Fitbit Premium, ya que hemos encontrado problemas para conectarnos con nuestra dirección de correo electrónico.
Estas métricas, más detalladas que las que ofrece la opción gratuita, requieren una suscripción que viene incluida durante seis meses con la compra del dispositivo. Una vez pasado este período de tiempo, se debe pagar 8,99 euros al mes o 79,99 euros al año para acceder a estadísticas más precisas o guías personalizadas a través de un asistente.
En definitiva, Google Watch 3 es el complemento perfecto para los interesados en los nuevos Google Pixel 9 (y más si se tiene la ocasión de combinarlo en el mismo color), así como para los que busquen en este 'wearable' un panel mayor que el de su predecesor.
No cabe duda de que el modelo de 45 mm es un gran acierto y con él Google amplía el número de clientes potenciales, aunque esta versión solo está disponible en color negro, verde liquen o plata. Para ampliar las tonalidades, en cambio, hay que irse al formato más pequeño, que sí introduce el color rosa.
La ampliación de la autonomía de su batería es otro detalle a tener en cuenta, aunque quienes busquen otras características en esta iteración no encontrarán grandes diferencias frente a Google Pixel Watch 2, ya que sigue incorporando funciones como la resistencia al agua hasta 50 metros de profundidad, NFC, GPS, Bluetooth 5 y WiFi 4G LTE.
De ahí que la diferencia de precio entre uno y otros pueda ser un factor determinante a la hora de escoger entre el modelo más antiguo, que actualmente tiene un precio de unos 279 euros, frente al más reciente, que parte de los 399 euros en el caso del de menor tamaño (41 mm) y de los 449 euros en el caso del más grande.