MADRID, 17 Jun. (Portaltic/EP) -
La marca de 'smartphones' motorola ha revivido su familia de terminales rugerizados defy, que debutó en 2010, con el lanzamiento de un nuevo integrante que incluye certificación IP68 de resistencia al agua y el polvo que garantizan su funcionamiento después de sumergirlo 35 minutos a 1,5 metros, así como a la resistencia ante caídas a 1,8 metros de altura.
motorola defy se ha desarrollado junto con el fabricante Bullit Group, especializado en dispositivos rugerizados y resistentes, y busca mejorar la durabilidad en un contexto en el que el 34 por ciento de los consumidores ha roto o dañado su móvil en los últimos tres años, según informa la marca en un comunicado.
El 'smartphone' cuenta con la certificación de resistencia al agua y al polvo IP68, con cubierta de doble sellado, lo que le permite sumergirse hasta a 1,5 metros durante 35 minutos, y el estándar militar MIL SPEC 810H, por el que aguanta caídas hasta a 1,8 metros, temperaturas extremas y vibraciones.
El dispositivo dispone de una cámara trasera triple con un sensor principal de 48MP (f/1.8), complementado por una lente de profundidad de 2MP y otra macro de 2MP, mientras que la cámara frontal es de 8MP y se alberga en un 'notch'. La cámara principal ofrece la tecnología Quad Pixel, que fusiona cuatro píxeles en uno para crear uno más grande cuando hay poca luz.
Los contenidos pueden visualizarse en su pantalla HD+ de 6,5 pulgadas, protegida por el cristal Gorilla Victus, el más resistente diseñado por la estadounidense Corning. Además, cuenta con una batería de 5.000mAh con carga rápida TurboPower de 20W, que ofrece dos días de autonomía.
Entre el resto de sus características, el terminal de motorola funciona con el sistema operativo Android 10, 4GB de memoria RAM, 64GB de almacenamiento ampliables por microSD, procesador Snapdragon 662 de hasta 2,0GHz y puerto 'jack' de auriculares de 3,5mm.
motorola defy está disponible en verde forjado o en negro, con un diseño texturizado para mejorar el agarre y una correa de muñeca desmontable para anclarlo la mano. Se pondrá a la venta en algunos mercados europeos en las próximas semanas con un precio de 329 euros.