Acceso a internet desde el hogar - PIXABAY
MADRID, 15 Feb. (Portaltic/EP) -
El 96 por ciento de los hogares españoles dispone ya de Internet de banda ancha, un dato que refleja la generalización del acceso a esta tecnología que los internautas utilizan sobre todo la comunicación, aunque persiste una brecha de acceso digital, sobre todo entre la población con menores niveles de estudios y de renta.
La implementación de la banda ancha en los hogares ha experimentado un crecimiento en los últimos años, hasta alcanzar el 95,9 por ciento en 2021 frente al 81 por ciento en 2016. Aunque este dato indica una generalización en la sociedad, sigue existiendo una brecha de acceso digital, con unos 660.000 hogares sin acceso a Internet.
Esta brecha es más evidente en el caso de los hogares con menos ingresos (inferiores a 900 euros mensuales), con algo más de 289.000 hogares sin acceso a la Red, aunque hay algo más de 200.000 hogares con ingresos entre 900 y 1.600 euros mensuales que tampoco tienen acceso a la red
Estos datos se desprenden de la brújula 'Uso de tecnología en los hogares españoles', publicada por el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI), dependiente de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, que señala cómo ha cambiado la pandemia las actividades digitales diarias.
El uso de Internet también se ha hecho más frecuente. Según el informe de ONTSI, casi un 92 por de los internautas lo usaban regularmente en 2021, un dato que crece levemente respecto de 2020 (91%), pero que es destacado si se tiene en cuenta que en 2016 el porcentaje era del 76 por ciento. Este uso frecuente de Internet es igual en hombres (91,7%) y en mujeres (91,9%).
Entre los usos digitales más extendidos están la comunicación y búsqueda de información. Así, el 90,2 por ciento de los internautas utiliza la mensajería instantánea, el 79,1 por ciento el correo electrónico y el 75,7 por ciento las llamadas y videollamadas.
A la comunicación le siguen la lectura de medios de comunicación 'online' (76,6%), la búsqueda de información sobre bienes o servicios (74%) y las consultas de salud (69,4%), donde las mujeres son más activas que los hombres (un 54% frente al 49%).
En lo que respecta a las compras 'online', el 55 por ciento de la población española ya realiza compras en comercios digitales. Sin embargo, este tipo de comercio no ha sido adoptado de manera uniforme: es la generación de 25 a los 34 años la mayor usuaria (74%), frente al 23 por ciento de la población mayor de 65 años.
Los niveles de estudios y de renta también tiene un impacto en la adopción de la compra 'online'. Según los datos recogidos en el informe, las personas con baja formación son las que menos compran en Internet (7%), mientras que las personas más proclives a hacer sus compras en línea (79%) son las que tienen un mayor nivel de estudios (licenciatura, máster o doctorado).
Un 65 por ciento de la población tiene habilidades digitales básicas y un 74 por ciento está familiarizada con aplicaciones móviles y ordenadores, pero sigue habiendo diferencias por nivel de estudios, edad y género. Entre los sectores con menor nivel de estudios, menos del 20 por ciento dispone de habilidades digitales; algo que se repite en el 34 por ciento de la población mayor de 64 años.
También ha crecido la confianza en Internet (60,7%). La franja de edad con mayor confianza (casi un 70%) es la de 16 a 24 años; en la de 65 a 74, solo un 50 por ciento confía en la Red. El uso de la administración electrónica, por otra parte, ha subido un 5,8 por ciento en 2021, con el 69 por ciento de la población realizando ya sus trámites en línea.
Por edad, el 98 por ciento de los niños, niñas y adolescentes de 10 a 15 años accede a la Red; el 95 por ciento usa el ordenador y un 70 por ciento el móvil. El acceso a Internet y el empleo de los dispositivos es mayoritariamente femenino.
La población de más de 74 años usa Internet sobre todo para la mensajería instantánea y las videollamadas; después, para leer noticias. El 27 por ciento de esta generación se conecta, aunque existe una brecha de género en el acceso y uso: un 26 por ciento de mujeres usuarias mayores de 74 frente a un 30 por ciento de hombres.
El informe también destaca que en el último año se ha ido desdibujando la tendencia de la pandemia a trabajar en remoto. En el primer trimestre de 2021 solo lo hizo el 18 por ciento de la población a distancia; mayoritariamente la población de 35 a 44 años.
Los que no tuvieron opción de teletrabajo argumentaron que su tipo de empleo no lo permitía (El 65 por ciento de los casos) y un 17 por ciento declaró preferir volver al modelo presencial.