MADRID, 25 Ago. (Portaltic/EP) -
Hay quien intenta colar drogas en un avión, otros que lo que quieren pasar son armas y también están quienes tratan de llevar a hurtadillas sus mascotas consigo. Quizá porque no quieren que se la pierdan, como a veces ocurre con las maletas, o porque no se pueden separar de ellas.
Este último es el caso de la loca historia que ha protagonizado un hombre en el aeropuerto de Guangzhou Baiyun, tal y como informa el South China Moring Post.
Li, que es como ha sido apodado de forma anónima este amante de los animales, fue a pasar el control de seguridad del aeropuerto. Cuando su mochila pasó por la cinta para equipajes, los guardias repararon en que una hamburguesa que había en el interior de KFC tenía unas "extrañas protuberancias".
Los responsables del control de seguridad pidieron a Li que les enseñase el interior de la mochila, motivando las protestas de este, que alegaba que ahí "no había ninguna tortuga, solo una hamburguesa". Sin embargo, finalmente tuvo que acceder a la petición y, efectivamente, en el interior del paquete de KFC encontraron una tortuga.
Los responsables de seguridad informaron a Li de que no podía llevar la tortuga en el interior del avión, por lo que la tuvo que dejar a cargo de un amigo durante su viaje. Como explicación, dijo que quería separarse de su "amada" mascota.