MADRID, 6 Ago. (Portaltic/EP) -
'Find my iPhone', el localizador de Apple para encontrar un dispositivo perdido, fue el protagonista ayer un episodio que acabó en tragedia. Según informa el Daily Record, Derek Grant de Glasgow (Escocia) cometió un homicidio este lunes cuando se disponía a recuperar el iPhone de su hijo, a quien le fue robado el 30 de agosto del pasado año mientras regresaba a casa desde su lugar de trabajo.
Grant pudo avergiguar la localización de su teléfono con la aplicación 'Find my iPhone' desde su dispositivo y, acompañado por sus tres hijos, se dirigió hacia el presunto ladrón, Patrick Bradley de 29 años. Iba armado con un cuchillo, pues Bradley cargaba a sus espaldas un largo historial de violencia.
El episodio no pudo ser más escabroso. En un forcejeo por recuperar el dispositivo de su hijo, Grant recibió una puñalada en el ojo izquierdo, perdiendo completamente la visión en este. Eso hizo que Grant se ensañara con su víctima y le asestó varias puñaladas a Bradley, quien murió a la mañana siguiente en el hospital de un paro cardíaco.
Los hechos fueron a parar a los tribunales. En un primer momento, Grant de 38 años y sus dos hijos más jóvenes, Lee de 17 años y Jamie de 16, fueron acusados de asesinato, pero el tribunal rectificó su sentencia y declaró culpable de homicidio a Grant quien señaló que "actué en defensa propia". "La acción de Grant eran sólo una reacción a la violencia extrema", apuntaló su abogado lan Duguid. La sentencia está prevista para septiembre.