MADRID, 15 Oct. (Portalgeek) -
El robot QRoSS-I es un pequeño robot capaz de ser lanzado como una bola para después desplegar sus patas y echar a andar. El artefacto es el resultado de una investigación del Instituto Tecnológico de Chiba, en Japón, y ha sido presentado en la conferencia internacional de Robots y Sistemas Inteligentes.
La tecnología asiática nunca dejará de sorprendernos y más si se trata de una máquina que a más de uno le recordará a un droideka, de la saga Star Wars, pero sin los rayos láseres.
La principal característica de este pequeño invento es que es capaz tanto de rodar por el suelo cuando es lanzado, como de sacar sus cuatro patas y echar a andar cuando para de rodar. Además, estas patas son rotatorias, es decir, que esté en la posición que esté el robot, las patas giran y se adaptan para que pueda volver a seguir su camino.
Se trata de un prototipo de 30 centímetros de diámetro, incluyendo su armazón de metal, pero para ser tan pequeño, su peso se eleva hasta los 2,5 kilogramos. Como las patas son rotatorias y retráctiles – sino, no podría hacerse una bola –, funcionan independientemente de su estructura circular y el robot puede andar por todo tipo de terrenos a 0,1 metros por segundo, y sin peligro de se caiga y eche a rodar.
El equipo creador del robot ha confirmado que está trabajando en una versión más ligera, según informa Engadget, pero no hay información sobre cuándo podremos verla. De conseguirlo, QRoSS-I podría tener multitud de utilidades, como por ejemplo incorporar una cámara y servir para inspeccionar zonas que hayan sufrido derrumbamientos o, incluso, ayudar en otro tipo de situaciones de emergencia.