WASHINGTON, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un tribunal federal de Estados Unidos ha ordenado a la empresa Apple que colabore para acceder a archivos ocultos en un teléfono móvil que pertenecía a la pareja que llevó a cabo el ataque terrorista de San Bernardino, una orden a la que Apple se ha opuesto.
El ataque a San Bernardino dejó un salgo de 14 muertos y más de una veintena de heridos el pasado 2 de diciembre. Entonces, y según ha explicado el CEO de la compañía, Tim Cook, en una carta a sus clientes, Apple entregó la información que les fue solicitada y que estaba en su poder al tiempo que los ingenieros de la compañía estuvieron a su disposición del FBI para cualquier consulta.
La orden judicial obliga a Apple a ayudar al FBI a recuperar la contraseña del 'smartphone' y a poner a disposición de las autoridades a sus técnicos para recuperar los archivos que Syed Farook, autor del tiroteo, pudo borrar de su teléfono iPhone. Los datos también se podrían haber perdido por la función de 'auto borrado' del propio móvil, que se activa tras introducir en varias ocasiones una contraseña errónea.
La fiscal del distrito central de California, Eileen Decker, indicaba horas antes que el Gobierno ha sido incapaz de acceder al contenido cifrado del móvil. "Apple tiene los medios necesarios para ayudar en la realización de su búsqueda, pero se ha negado a proporcionar esa asistencia de manera voluntaria", dijo.
El FBI trata de determinar si la pareja recibió ayuda adicional para trazar su plan y llevar a cabo el ataque. Los investigadores también intentan explicar por qué los terroristas dejaron explosivos en el lugar del tiroteo, que no llegaron a ser detonados, según ha informado el diario estadounidense Los Angeles Times.
LAS RAZONES DE APPLE
Cook ha explicado en la misma carta que esta orden amenaza la seguridad de sus clientes y que desde la compañía entienden que tiene "implicaciones que están más allá del caso que nos ocupa", como el hecho de que han instado a Apple a crear una nueva versión de su sistema operativo que permita traspasar la encriptación.
Esta nueva versión se usaría para acceder a la información del móvil del autor del tiroteo de San Bernardino, pero Cook entiende que un 'software' así, que todavía no existe, "en las manos incorrectas tendría el potencial de desbloquear cualquier iPhone".
Cook ha defendido la necesidad de la encriptación, para lo que ha recordado que los 'smartphones', en este caso iPhone, se han convertido en una parte esencial de nuestro día a día y en ellos los usuarios guardan datos sensibles, como información financiera, datos de contacto o sobre su salud.
Si bien entiende que se refieren a un caso y a unas circunstancias concretos, acatar la orden puede ser un "precedente peligroso", al tiempo que no hay garantías de que en caso de que desarrollen el 'software', se use solo en esta ocasión.