MADRID, 29 Sep. (Portaltic) -
Hay personas que no saben lo que es un disquete mientras que algunos países se resisten a abandonar su uso. Es el caso de Noruega, que mantiene informados a sus doctores sobre sus pacientes mediante este sistema de almacenamiento.
Los médicos noruegos reciben una vez al mes un disquete del Directorio de Salud noruego para actualizar los datos de sus pacientes, si bien tienen la opción de acceder a una base 'online', algo que también hacen.
Sin embargo, el disquete permanece en uso debido, especialmente, a su coste, casi inexistente si se compara con el de un USB y consume menos tiempo al copiar datos que un CD-ROM, según ha explicado el desarrollador noruego Finn Espen Gundersen, quien ha reconocido en su blog que él también los utiliza.
Según Gundersen, cada ciudadano elige un doctor como su médico de confianza. El gobierno mantiene el directorio del paciente, pero como el ciudadano es libre de cambiar de doctor cuando quiera, el gobierno debe mantener a los profesionales de la medicina al corriente de sus pacientes, les envía una vez al mes un listado con los datos de los ciudadanos a los que deben atender, que llega en el disquete.
Gundersen, en concreto, trabaja con los disquetes para asegurase de que estos llegan con la información correcta al médico que corresponde, para lo que emplea un código de barras y un lector de disquetes sin conexión.
Un dato que ha remarcado Gundersen es que los lectores de disquetes tienen una vida útil mucho menor que la de los propios disquetes, aunque ha asegurado que todavía pueden encontrarse 'online' para su compra.
Sin embargo, por mucho que funcione este sistema, parece que el gobierno noruego dejará de distribuir los disquetes a principios de 2016, obligando a todos los médicos a acceder a los historiales digitales de sus pacientes.