Proteger vidas, una de las muchas aplicaciones de la impresión en 3D

   MADRID, 15 Dic. (EDIZIONES/Portaltic) -

   La utilidad de las impresoras en tres dimensiones está llegando a campos inimaginables hace unos años. Ya han ayudado en estos últimos meses a proteger vidas contra el coronavirus. Incluso piezas creadas por este sistema forman ya parte del complejo engranaje de los aviones.

   Ventiladores de emergencia y viseras contra el coronavirus, obras de arte con siglos de historia que pasan a tener una segunda vida, y piezas de aviones ligeras y resistentes a la vez. Son solo algunos ejemplos de cómo las nuevas tecnologías de impresión en 3D siguen avanzando a pasos agigantados y aportando aplicaciones sorprendentes en campos muy diversos.

   La evolución se ha extendido a tantos campos de la actividad empresarial, artística y cotidiana que casi no sorprende ver prótesis médicas integradas en el cuerpo humano o incluso obras de arte en ferias internacionales realizadas con esta técnica.

   La industria de la impresión en 3D sigue creciendo a pasos agigantados y todo indica que lo mejor está aún por llegar.

IMPRESORAS QUE LUCHAN CONTRA EL CORONAVIRUS

   La impresión en tres dimensiones tiene también mucho que decir en la crisis sanitaria actual. En concreto, ya se ha probado su repercusión positiva en áreas como la medicina personalizada de precisión, entre muchas otras.

   Por ejemplo, en la Unidad de Medicina y Cirugía Experimental del Hospital General Universitario Gregorio Marañón se produjeron más de 12.000 componentes en 3D durante los primeros meses de la pandemia, de acuerdo con datos hechos públicos por esta entidad.

   Los componentes construidos han sido varios: ventiladores mecánicos de emergencia, conectores, viseras de protección personal o componentes de circuitos de ventilación mecánica, entre otros.

   Es decir, toda una serie de aportaciones que ayudan a proteger y salvar vidas. Una función que casi parecía de ciencia ficción cuando la impresión en tres dimensiones daba sus primeros pasos y que ahora es una realidad tangible y medible. Y lo que es más importante: ayuda a salvar vidas.

LAS PYMES, EN EL CARRO DE LAS ÚLTIMAS TECNOLOGÍAS

   Paralelamente, se ha probado el valor de este tipo de impresión para los utensilios y aparatos médicos más cotidianos, y también para actuaciones más sensibles, como las realizadas en quirófanos.

   A este respecto, ofrecer materiales de calidad a medida de manera rápida y eficaz a través de un primer prototipado no es ya cuestión de las empresas de mayor tamaño, sino que otras más pequeñas vienen ofreciendo instrumental médico a distintas instalaciones hospitalarias y clínicas.

   Se trata de un aspecto que no pasa inadvertido, ya que está redundando en la creación y crecimiento de pequeñas y medianas empresas que, a su vez, generan una importante cantidad de puestos de trabajo de alta cualificación.

LOS 'CLONES' LLEGAN AL MUNDO DEL ARTE

    ¿Es posible que la tecnología pueda imitar al arte? En otras palabras, ¿son posibles los clones artísticos? Los avances abren nuevos paradigmas. En el campo de la cultura también: ya se pueden ver fieles reproducciones de obras de arte icónicas. Es el caso que se ha dado con algunas de las primeras obras de Velázquez.

   Sus primeros cuadros han sido ya objeto de fieles reproducciones en 3D a través de un proyecto común de la Fundación Factum y el CEEH (Centro de Estudios Europa Hispánica) para dotar a la futura Casa Natal de Velázquez de estas representaciones.

   Se trata de una iniciativa original que "devolverá" así réplicas de pinturas del artista sevillano a su ciudad natal. Estas recreaciones, digitalizadas en 3D y en color de alta resolución, conservan todos los detalles del cuadro, desde una fiel representación de sus colores hasta posibles imperfecciones debidas a la acción del tiempo.

   En los talleres de Factum Arte en Madrid no solo han combinado técnicas artesanales y de vanguardia. También se ha recabado información digital que servirá además para proporcionar documentación esencial sobre el estado de conservación de las obras.

¿EL NACIMIENTO DE UN NUEVO FORMATO ARTÍSTICO?

   Evidentemente, la impresión en 3D no solo se usa para réplicas. Fuera del campo de la restauración, cada vez más artistas crean desde cero objetos pensando en este formato tridimensional ligado a impresoras de última generación.

   Combinan así lo tradicional con técnicas digitales rompedoras. Y no solo eso. Los defensores de este método argumentan que, además, hace que más personas se acerquen al arte ya que no se requiere tanto el saber esculpir, sino materializar ideas usando las últimas herramientas.

INNOVACIONES DE ALTOS VUELOS

   Los experimentos de este tipo de tecnología no se han limitado a tierra firme, sino que han dado el salto literal a grandes alturas a través de la industria aeroespacial.

   De hecho, este sector ha sido de los pioneros en incorporar estas innovaciones. Ejemplos de esta tendencia puntera en este campo hay muchos. Conductos, herramientas, componentes de motores de cohetes, tanques de aceite y combustible son solo algunos casos de piezas o elementos fabricados a través de impresoras de vanguardia.

   Y es que este tipo avanzado de fabricación da lugar a piezas complejas que vienen marcadas por un gran factor de confianza: su alta resistencia. Esta característica, junto a otras como el ensayo con éxito de diseños que han pasado las pruebas más exigentes redundan en piezas y componentes de menor peso.

   No es un detalle menor, ya que este último valor es esencial dentro del sector, unido a la capacidad de crear nuevos diseños y prototipos de rápido desarrollo.

MUCHAS EXPECTATIVAS PARA EL FUTURO PRÓXIMO

   Los ingenieros de grandes empresas de esta importante actividad comercial y militar han tenido en cuenta la gran fiabilidad de los materiales empleados para incorporarlos a su día a día e incluso investigar nuevas formas de aplicar esta innovación.

   De cara al futuro, son muchos los proyectos de prestigiosas universidades y de grandes empresas para intentar sacar más partido aún en los próximos años a las ventajas de un sistema que vaticina más ventajas aún. Y ello ya se nota en la atención mediática y en los presupuestos dedicados a la investigación en los últimos tiempos.