MADRID, 28 Ene. (Portaltic/EP) -
El sector de la construcción se enfrenta al reto de la digitalización y 2019 podría ser un año clave en esta transición, según apunta la compañía de 'software' IFS, al tiempo que advierte de que "el 10 por ciento de las empresas de construcción tradicionales podría cerrar en los próximos 5 años".
"Multitud de empresas experimentarán un salto digital a medida que exploren la implementación de un 'software' empresarial integrado en proyectos por primera vez", señala Kenny Ingram, IFS Global Industry Director for Engineering, Construction & Infrastructure. Esta transición responde a la "necesidad de impulsar la eficiencia, aumentar la productividad y establecer una entrega óptima".
Para ello, resulta determinante la integración de un sistema de planificación de recursos empresariales (ERP, por sus siglas en inglés), que se hace cargo de distintas operaciones internas de una empresa. "El poder del ERP para las empresas de construcción es fundamental para conectar e integrar todas las funciones de un proyecto, desde las finanzas hasta las operaciones y el diseño, lo que permite la máxima adaptabilidad", explican desde IFS.
Al mismo tiempo será clave en este proceso de digitalización el modelado de información de construcción (BIM), que funciona como un motor de integración y gestión del ciclo de vida de los activos digitales. "BIM es una parte integral de pasar de un mundo basado en documentos a un mundo basado en datos", añade Ingram.
Para las empresas de construcción, uno de los retos de este 2019 será precisamente cómo fusionar y aprovechar las fortalezas de combinar estos dos sistemas, ante un panorama que se caracteriza por "la reducción de los márgenes de ganancia y el aumento de la competencia" -según las previsiones de los expertos de IFS-.
"Los márgenes más reducidos, la escasez global de habilidades profesionales y los nuevos participantes en la industria, están incrementando la presión sobre las empresas de construcción tradicionales. La necesidad de adaptabilidad nunca ha sido más urgente", sentencia Ingram.
Otra de las tendencias claves del sector para 2019 es la construcción modular, impulsada por una escasez mundial de recursos y viviendas. La ONU estima que más de 2.000 millones de nuevas viviendas deberán construirse en los próximos 80 años. La fabricación modular permite construir casas asequibles, más rápido y en mayor volumen.
IFS advierte en este punto de que "nuevos jugadores entrarán en la industria, desde empresas de fabricación, cadena de suministro y logística, hasta gobiernos locales, bancos y compañías de seguros". En este contexto, las empresas de construcción "necesitarán un control más estricto y una mayor adaptabilidad en cada aspecto de sus proyectos".
El aumento de la modularidad está incorporando nuevos participantes pertenecientes a los sectores de fabricación, cadena de suministro e ingeniería 'software'. Por ello, desde IFS no descartan que "gigantes digitales como Amazon o Uber lleguen a ver construcción como un sector propicio para la irrupción".
"2019 será el año en que muchas empresas finalmente comiencen a considerar sistemas ERP, no como funciones financieras de 'back-office' aisladas, sino como sistemas esenciales que brindan coherencia, velocidad y eficiencia a un proyecto o negocio. 2019 podría ser el año en que la construcción dé un gran paso hacia adelante, adoptando la transformación digital", concluye Kenny Ingram.