MADRID, 12 Abr. (Portaltic/EP) -
Universal Music Group (UMG) ha instado a plataformas de música en 'streaming' como Apple Music o Spotify a bloquear el entrenamiento de modelos de inteligencia artificial (IA), debido a que con ello estarían violando los derechos de autor de las canciones que utilizan.
El sello discográfico ha señalado que considera que ciertos sistemas de IA "podrían haber sido entrenados con contenidos protegidos con derechos de autor" sin obtener los consentimientos necesarios y sin abonar una compensación económica a los creadores de dichas obras.
El sello discográfico asegura que no dudará en "tomar medidas" para proteger los derechos de sus artistas, según unos correos electrónicos a los que ha tenido acceso recientemente Financial Times.
De ese modo, ha solicitado a las compañías dedicadas a estos servicios de contenido en 'streaming' que bloqueen a los desarrolladores de IA generativa el acceso a sus catálogos de música.
"Gran parte de la IA generativa está entrenada con música popular. Podrías decir: quiero componer una canción con una letra como la de Taylor Swift, la voz al estilo de Bruno Mars y que se parezca a una canción de Harry Styles. El resultado que obtienes se debe a que la IA se ha entrenado con la propiedad intelectual de esos artistas", ha comentado una fuente relacionada.
Desde este periódico recuerdan que Google ya dispone de un servicio que genera música a partir de texto, MusicLM, entrenado con un conjunto de datos de 280.000 horas de música y que, por el momento, la compañía no ha lanzado por un "riesgo de posible apropiación indebida de contenido creativo".
Esto se debe a que investigadores de la compañía tecnológica habrían descubierto que alrededor del uno por ciento de la música que generaba esta IA era una réplica exacta del trabajo con el que había sido entrenada, esto es, de material protegido con derechos de autor.
Cabe recordar que esta no es la primera vez que profesionales del sector artístico muestran su preocupación por las posibilidades de la inteligencia artificial y su capacidad para eludir ciertas limitaciones dispuestas a proteger el 'copyright' de sus creadores.
Por ejemplo, el pasado enero un grupo de artistas demandó a tres compañías dedicadas al arte digital -Stability AI, DeviantArt y Midjourney- por infringir derechos de autor en el desarrollo de obras artísticas creadas por IA con la herramienta Stable Difussion.
Como consecuencia de esta problemática, investigadores de la Universidad de Chicago crearon poco después una solución llamada Glaze que busca proteger las obras realizas por los artistas y evitar que estas acaben entrenando modelos de inteligencia artificial.