MADRID, 25 Jun. (Portaltic/EP) -
Imagina que alguien entra en tu casa y que durante el robo, no se le ocurre otra cosa que entrar en Facebook en tu ordenador. Después, no solo no se lleva el ordenador, sino que lo deja en la casa con la sesión iniciada.
Este escenario, el sueño de todo detective, es completamente real y ha ocurrido en Minnesota, EEUU. Nicholas Wig entró en la casa de James Wood y se llevó dinero en efectivo, un reloj, tarjetas de crédito y un teléfono, además de dejar su sesión en Facebook abierta.
Cuando Woods entró en su apartamento y fue consciente del robo, se asustó y se puso a evaluar los daños. En ese momento se dio cuenta de que el ladrón se había dejado Facebook abierto y decidió publicar en su muro, informando del robo de Wigs y dejando su propio número de teléfono.
El brillante ladrón escribió a la víctima del robo y este le respondió que se había dejado una prenda de ropa en su apartamento, por lo que le proponía quedar para devolvérsela. Cuando el ladrón acudió al encuentro, la policía, evidentemente, le detuvo.
El que seguramente sea el ladrón más torpe y adicto a las redes sociales del mundo ahora se enfrenta a una sentencia de 10 años de cárcel y a una multa de 20.000 dólares.