MADRID, 20 Ene. (Álvaro Velasco/Portaltic) -
Tú subes las fotografías, él hace arte con ellas. Lucas Levitann es un artista, ilustrador y director de cine brasileño afincado en Londres que se ha hecho famoso gracias a la manipulación de fotografías originales. Nada que suene a nuevo, ya que las redes sociales se inundan cada día de este tipo de imágenes. El mérito de Lucas es lo elaborado de su trabajo y su particular estilo. Encaja en fotos muy normales a personajes de cuento muy gamberros, como sus ya famosos duendecillos.
La obra de este artista tiene mucho que ver con el arte urbano de los graffiteros. De hecho, lo que él hace con fotografías recuerda a lo que Bansky hace en la calle; integrando fantasía y realidad. Tampoco pide permiso. "Prefiero usar la palabra robo en lugar de elección porque explica mucho mejor el proceso. Yo no pido permiso al fotógrafo porque de esa forma se perdería el factor sorpresa", explica el brasileño que también se ocupa de nombrar a sus víctimas y promocionar así sus cuentas de Instagram además de agradecerles haber dejado su imagen en sus manos.
Al igual que ha ocurrido con los graffitis, muchos no ven en su obra vandalismo, sino arte. Desde que comenzó su popularidad, su trabajo se ha disparado y sus obras han aumentado exponencialmente de precio. Las peticiones que recibe de usuarios que quieren que usen sus fotografías se cuentan por miles, relata Levitan en una entrevista que recoge Yorokobu: "Evito invadir imágenes que la gente me sugiere. Prefiero buscar alternativas por mí mismo, visitando galerías de todo tipo de fotógrafos. No se trata tanto de la calidad de la imagen como lo que ésta me inspira".
La forma en la que se le ocurrió comenzar con esto fue muy curiosa: un ladrillo precipitado desde un edificio que estuvo a punto de abrirle la cabeza fue el culpable. "Ocurrió un día que estaba en Reedchurch Street. Había unas obras y el ladrilló cayó desde el andamio, más o menos desde una altura de cuatro pisos. Me hizo pensar en que valía la pena dedicar el tiempo a lo que a uno más le gusta, en este caso, los dibujos".
Hasta el momento su trabajo no le ha traído ningún problema con los fotógrafos asaltados. "Tengo una profunda admiración por su trabajo. Espero que el mío sea visto como una especie de 'robo honorable'. Trato de crear una alianza con mi dibujo y la fotografía. Mi intención nunca es la de tomar el control, sino construir una nueva historia juntos", comenta el artista. De hecho sus personajes se han convertido también en famosos stickers.
Aquí os dejamos su cuenta en Instagram, que es imprescindible. Además, en su página web podéis ver curiosas y más complejas historias construidas a partir de estas imágenes.