MADRID, 29 Ago. (Portaltic/EP) -
Windows 95 marcó un antes y un después en el sistema operativo de Microsoft con la introducción del menú de inicio y de la barra de tareas que, junto a otros elementos icónicos, han acompañado a los usuarios de los ordenadores personales en los últimos 25 años.
Precisamente, para conmemorar el lanzamiento de Windows 95, la compañía tecnológica ha compartido la evolución que en este tiempo ha experimentado el sistema operativo hasta llegar a la actual versión, Windows 10.
El botón de inicio es, quizá, el elemento más icónico de Windows 95, tanto que Microsoft le dedicó la campaña publicitaria para su llegada al mercado. Un botón gris rectangular, con el icono de Windows (las cuatro ventanas de colores) y la palabra 'start' se ha convertido en la actualidad en un botón cuadrado con fondo oscuro y el icono de Windows más estilizado -de un único color- situado en el centro.
Entre ambos, el botón rectangular gris original con un diseño menos pixelado, el botón con esquinas redondeadas y fondo verde en el que todavía se mantiene la palabra 'start', y el botón circular con fondo azul y el logo de Windows.
Al pinchar sobre él, se abre un menú que ofrece acceso a aplicaciones, opciones de configuración y archivos. Se trata también de otro de los elementos característicos que introdujo la interfaz de usuario de Windows 95, y que en su evolución pasa del fondo gris y los iconos pixelados a un diseño más amplio, con más opciones y que deja más espacio libre en el escritorio.
El diseño de los iconos también ha evolucionado en estos 25 años. En este caso, la compañía ha destacado los cambios que ha experimentado el de la papelera, pero también los de las aplicaciones, de las que muestra las diferencias en las ventanas en distintas versiones de Windows y su gestión en la pantalla hasta llegar a la multitarea.
Windows 95 llegó al mercado el 24 de agosto de 1995, tanto en CD como en disquetes. Con esta versión llegó la interfaz gráfica de usuarios, con menú de inicio y barra de tareas, y el soporte de la función 'plug and play', con el que se conecta el hardware y los periféricos.