La Fundación para la Historia de los Videojuegos (VGHF) ha trasladado su decepción ante la decisión de la Oficina de Derechos de Autor de Estados Unidos de no otorgar una nueva exención en la Ley de Derechos de Autor del Milenio Digital (DMCA), con la que pretendían permitir a las bibliotecas eludir los bloqueos digitales de los videojuegos para académicos e investigadores, aunque ha afirmado que seguirán "abogando por un mayor acceso y permisos legales para la preservación de los videojuegos".