MADRID, 30 Nov. (Portaltic/EP) -
La Asociación Internacional de Desarrolladores de Juegos (IGDA, en sus siglas en inglés) ha llamado a que las empresas regulen el uso de las cajas de botín dentro de los videojuegos y expliquen a los consumidores el funcionamiento de los productos de compra integrada antes de que los gobiernos desarrollen leyes restrictivas con su uso al relacionarlos con el juego por su factor de azar.
La asociación ha presentado una iniciativa a través de un comunicado de prensa publicado en su página web oficial, en el que explica las medidas que creen convenientes realizar para poder informar sobre las cajas de botín. En este sentido, la directora ejecutiva, Jennifer MacLean, considera que la industria y la comunidad de los videojuegos debe actuar "inmediatamente" e informar "para que los consumidores, y especialmente los padres, entiendan qué hay en los juegos a los que juegan ellos o sus hijos".
Las cajas de botín, o 'loot boxes' en inglés, son productos ligados a un juego que se compran por medio de microtransacciones dentro de este. Los 'cofres' contienen una variedad de recompensas o elementos distintos que el usuario obtiene de forma aleatoria después de la compra. Y es precisamente este componente de azar el que preocupa a algunos gobiernos.
La directora ejecutiva de la IGDA indica que al realizar "una compra con dinero real de un objeto desconocido" se corre el riesgo de "activar las leyes de juego" que muchas veces "no son claras". Por ello, advierte de que si la industria no autorregula el uso de las cajas de botín, los gobiernos de distintos países podrían encargarse de esa tarea y crear "leyes significativamente restrictivas" que impactarían en este tipo de recompensas.
"Abordar cómo se usan las cajas de botín es lo correcto y lo más inteligente que la industria de desarrollo de juegos global puede hacer", defiende MacLean, especialmente en juegos destinados a niños. También destaca "la naturaleza inmersiva" de los juegos, que requiere de un mayor control, preocupación y regulación que en otros campos.
A este respecto, MacLean comparte los pasos a seguir para regular las cajas de botín dentro de los videojuegos, entre los que se encuentran "afirmar un compromiso de la industria para no comercializar cajas de botín para niños", o lanzar campañas educativas que sirvan para concienciar a los progenitores de los controles parentales disponibles, y que con ello se establezca una forma adecuada de jugar.
Además, la IGDA también apela a revelar de forma clara las probabilidades que tienen de aparecer las diferentes recompensas posibles dentro de una caja de botín, algo que, por ejemplo, en China es obligatorio por ley.
INVESTIGACIONES DE LA FCT DE ESTADOS UNIDOS
Esta medida está motivada por la decisión del presidente de la Comisión General de Comercio de Estados Unidos (FTC, en inglés), Joseph Simons, el cual afirmó este martes en el Subcomité de Comercio del Senado sobre Protección al Consumidor que investigaría las cajas de botín para asegurarse de que los niños están protegidos, y del conocimiento de los padres sobre estas recompensas, según ha publicado el semanario Variety.
La iniciativa procede de la senadora estadounidense Maggie Hassan, quien pidió a principios de año a la Entertainment Software Rating Board -el sistema de clasificación por edad de los juegos-- que realizara investigaciones sobre las 'loot boxes', sus porcentajes de aparición, su comercialización y el funcionamiento de las microtransacciones, así como el alcance y el impacto de estos productos dentro de los juegos.
En declaraciones a Variety, Hassan consideró que "la FTC tiene la responsabilidad de examinar este tema", y el martes en el Subcomité de Comercio del Senado expresó que la FCT debía "garantizar que los niños estén protegidos adecuadamente y educar a los padres sobre la posible adicción u otros impactos negativos de estos juegos". Las 'loot boxes' representarán 50 mil millones para la industria del videojuego en el año 2022, según investigaciones a las que alude Hassan.
REGULACIÓN COMO JUEGO DE AZAR EN EUROPA
En Europa, algunos gobiernos ya han comenzado a investigar las cajas de botín y su relación con las legislaciones de juegos de azar. La Dirección General de Ordenación del Juego española, junto a organizaciones similares pertenecientes a otros 15 países europeos, enviaron una carta en septiembre en la que se denunciaban las cajas de botín al considelarlas similares a las apuestas en línea, escrito que se discutió durante el Foro Europeo de Reguladores del Juego de 2018 celebrado en Praga (República Checa).
Como ejemplos específicos, en Bélgica se estudió el sistema de cajas de botín en títulos como FIFA 18, Overwatch, Counter Strike: Global Offensive y Stars Wars Battlefront II, y se concluyó que en los tres primeros títulos estos productos constituían "un juego de azar que está sujeto a la ley belga de juego", según el ministro de justicia belga, Koen Geens.
Geens concluyó que las 'loot boxes' debían borrarse, y que si eso no sucedía, los encargados de los juegos se arriesgaban a sentencias de prisión de hasta cinco años y multas de hasta 800.000 euros, dígitos que podrían aumentar en caso de que los juegos estuviesen relacionados con menores de edad.
Por su parte, la autoridad del juego en los Países Bajos estudió también este año el funcionamiento de las cajas de botín, y en base a una investigación, cuatro de diez juegos examinados desobedecían la Ley holandesa de Apuestas y Juegos. La casualidad determina su contenido, además de que los premios tienen valor económico y pueden intercambiarse fuera del juego, por lo que según declaró el organismo, "está prohibido ofrecer este tipo de juego de azar sin licencia a jugadores holandeses".
La autoridad de juego exigió a los editores que eliminaran las cajas de botín con elementos "sensibles a la adicción", entre los que se encuentran los efectos visuales y la posibilidad de abrir estos cofres uno detrás de otro. También se sentenció que se debían implantar medidas para excluir a los grupos vulnerables.
A partir del 20 de junio de 2018, la autoridad declaró que podría "iniciar acciones de ejecución contra proveedores de juegos de azar con cajas de botín que no se adhieran a esta norma".
En el caso de Dinamarca, la Autoridad de Juego Danesa explicó que las cajas de botín deben tener una licencia y estar sometidas a la Ley de Juego del país en caso de que se realice un pago por ellas, exista un elemento de azar en su apertura y haya una ganancia con el premio que pueda convertirse en un bien financiero, como han concluído que sucede con Counter Strike: Global Offensive.
Por último, la Autoridad de Regulación de Juegos En Línea (ARJEL) de Francia desestimó que las 'loot boxes' fueran apuestas ya que no las consideran un gasto financiero que suponga siempre una ganancia potencial. No obstante, la autoridad sí es favorable a una regulación a nivel europeo.