BRUSELAS 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha lanzado este viernes una nueva web en la que los consumidores podrán informarse de las notificaciones sobre productos retirados del mercado y las advertencias públicas de las autoridades sanitarias y las propias empresas en cada Estado miembro, con motivo del 25 aniversario del sistema de alerta alimentaria y alimentos animales (RASFF).
El comisario de Salud, Tonio Borg, ha explicado que el nuevo portal constituye una herramienta "innovadora" para que los consumidores reciban "la última información sobre peticiones de retirada de productos" en cualquier Estados miembro, tanto por parte de las autoridades como de las empresas. También ha destacado que se trata de información "ahora pública, permanente e inmediatamente disponible" para el consumidor.
"Los consumidores podrán con esta herramienta gratuita en Internet, que lanzamos hoy, identificar alimentos bajo alerta a través del sistema y permitirles por tanto hacer elecciones más informadas, con independencia de donde estén", ha precisado.
"Un consumidor británico de vacaciones, por ejemplo, en España, Malta o Chipre podrán consultar la web para recibir información actualizada sobre si cualquier producto está bajo alerta en estos países. O un consumidor finlandés puede comprobar las alertas antes de hacer la compra en Finlandia", ha explicado, recalcando que el consumidor podrá seleccionar el país de su interés.
CAEN LAS NOTIFICACIONES EN 2013
Un total de 3.205 notificaciones sobre productos de alimentación humana y animal producidos en la UE e importados de terceros países fueron registradas a través del sistema de alerta europeo en 2013, un nueve por ciento menos que el año anterior, ha confirmado el comisario, a partir de los datos del informe de RASFF del año pasado.
Del total de notificaciones originales, el 84,6 por ciento se referían a productos alimentarios, el 8,5% a productos de alimentación animal y el 6,9% a posible riesgo no con los productos alimentarios en sino con materiales, por ejemplo de su empaquetado.
Asimismo, del total de notificaciones originales, 596 fueron clasificados como alertas, 1.462 fueron rechazos de entrada en las fronteras de la UE, 442 han sido notificaciones de información para seguimiento y 705 como información para atención y se tradujeron en 5.158 notificaciones de seguimiento. Éstas han conllevado acciones como la retirada del mercado y devolución al fabricante y "en algunos casos" la incautación o destrucción de productos alimentarios, ha precisado Borg.
El comisario ha atribuido la caída en el número de notificaciones totales frente al año pasado al hecho de que los terceros países han aumentado los controles antes de su exportación a Europa, aunque ha reconocido que caben diferentes interpretaciones.
Igualmente, ha recordado que a raíz del escándalo de la carne de caballo la atención de "la seguridad alimentaria al fraude alimentario" tras recordar que dicha crisis "nunca" fue un problema de seguridad alimentaria, sino de "fraude en el etiquetado" en productos como lasañas y albóndigas a base de vacuno, cuando en realidad contenían carne de caballo.
El sistema informático "propio" europeo para denunciar y detectar este tipo de fraudes estará operativo "el próximo año", pero entre tanto se denuncian "temporalmente" también a través del RASFF.