MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
La jornada electoral prevista en Cataluña para el próximo 21 de diciembre será no lectiva es decir, no habrá clase en la comunidad autónoma, según han adelantado a Europa Press en fuentes del Ministerio de Educación.
Sin embargo, el día posterior, el viernes 22 de diciembre, sí habrá clase y será jornada lectiva, de acuerdo a las mismas fuentes.
En un comunicado, el Ministerio de Educación, que tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña es el responsable de estas políticas, no se impartirá clase el 21D "de conformidad con la normativa vigente en materia electoral".
En concreto, según el artículo 13.4 del Real Decreto 605/1999 "en el supuesto de que el día fijado en los correspondientes Decretos de convocatoria para la celebración de las elecciones no sea festivo, se considerará inhábil a efectos escolares en el territorio correspondiente".
El día siguiente, 22 de diciembre, viernes, será día lectivo, es decir, los centros escolares de Cataluña impartirán de nuevo clases "con la habitual normalidad, tal y como marca el calendario escolar de Cataluña para el curso 2017-2018".
Esta era una demanda del sindicato mayoritario en el ámbito docente en Cataluña, Ustec Stes, cuyo portavoz, Ramon Font, explicó en declaraciones a Europa Press que si la convocatoria electoral se descontara como día lectivo todavía se estaría respetando la horquilla de entre 175 y 178 jornadas que debe tener cada curso.
En su opinión, es "inviable" compaginar las elecciones con un día de elecciones y no hay problema en que las escuelas vuelvan a abrir el viernes 22, en el último día de clase antes de las vacaciones de Navidad, pues son las fechas en que los profesores están cerrando informes.
Desde la Associació de Directius de l'Educació Pública de Catalunya (Axia), su presidenta, Isabel Sánchez, se mantenía a la expectativa de esta decisión del Gobierno porque, según declaró a Europa Press, "afecta" al final del trimestre.
Mientras, en la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Catalunya (Fapac), habían pedido que la jornada fuese declarada no laborable y que se hiciera cuanto antes para que las familias pudieran organizarse.