BARCELONA 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
Cataluña educa peor a los alumnos inmigrantes que otras comunidades autónomas y países con mayor índice de extranjeros, según ha concluido la Fundació Jaume Bofill en su informe 'Pisa 2009: Evaluación de las desigualdades educativas en Cataluña' presentado en Barcelona.
En rueda de prensa, el director del informe, Ferran Ferrer, ha explicado que la enseñanza de los alumnos inmigrantes es "el problema más grave del sistema educativo catalán", ya que entre los inmigrantes y los autóctonos se da una diferencia de 82 puntos, una cifra a la cola de países como Italia, Austria, Alemania y Portugal, que también registran altos niveles de inmigrantes en las aulas.
Además, esta diferencia también se pone de relieve en el caso de España, donde regiones como Madrid, Navarra y Aragón solamente registran 59, 54 y 65 puntos de diferencia, respectivamente.
Para evitar esta realidad, Ferrer ha aconsejado a las administraciones evitar al máximo los guetos y acompañar a las familias inmigrantes en el proceso de escolarización de sus hijos --ya que actualmente están bastante "abandonadas" por parte de la administración--, y a los profesores les ha instado a educar con expectativas de mejora a estos alumnos.
INMIGRACIÓN NO EQUIVALE A FRACASO
El informe avala, además, que tener muchos inmigrantes en las aulas no significa tener peores resultados, ya que si esto fuera cierto, las regiones con más inmigrantes estarían a la cola de los resultados.
No obstante, los alumnos extranjeros que estudian en colegios privados tienen mejores resultados que los que van a escuelas públicas, un dato en el que no incide tanto el nivel socioeconómico de las familias como la concentración misma de inmigrantes: los colegios con más de un 25% de inmigración obtienen 374 puntos, mientras que los que están por debajo de esta tasa alcanzan los 429 puntos.
Este dato no afecta a los alumnos autóctonos a pesar de que estudien en colegios con muchos inmigrantes, ya que ellos se mantienen entorno a la media (500 puntos) con 495 puntos, lo que demuestra que los inmigrantes tampoco bajan el nivel de los autóctonos.
Más allá de las diferencias existentes entre alumnos de clases sociales distintas, el informe pone sobre la mesa que el 12,5% de los estudiantes de entornos desfavorecidos logran escapar al determinismo social, quienes destacan por alcanzar niveles equivalentes hasta tres cursos por encima del suyo: mientras la puntuación de su entorno se sitúa en 469, éstos suman 577 puntos --muy por encima de la media catalana--.
Otra de las realidades que el informe señala es que la excelencia de los estudiantes se reparte entre todos los tipos de colegios --desmontando que sólo se sitúe en los privados--, y remarca que Cataluña sólo tiene un 3,6% de alumnos excelentes, lejos de la media de la OCDE --del 8%-- y de otras comunidades autónomas --con índices del 6%--, por lo que tiene un "largo camino por recorrer".
Por otra parte, en cuanto a alumnos con bajos resultados, Catalunya se encuentra en la media, pero el informe remarca que el fracaso se acumula en institutos concretos de barrios desfavorecidos, algo que también debe remediarse, ha dicho.