Un coordinador COVID en cada centro, reducción de grupos y pruebas para docentes, medidas del "plan B" educativo del PP

   Los 'populares' perfilan en una página difundida por Twitter su alternativa a los planes del Gobierno para la 'vuelta al cole'

   MADRID, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El "plan B" del PP para la 'vuelta al cole', que el presidente del partido, Pablo Casado, ha perfilado este miércoles con los consejeros de educación y sanidad 'populares' contempla medidas como un coordinador COVID en cada centro educativo, la reducción de grupos y pruebas de detección para los profesores.

   "En una pandemia, la responsabilidad por ley es del Gobierno, que no puede derivársela a las autonomías. Debe garantizar una vuelta segura a las aulas en toda España con medios suficientes. Hoy presentamos con los consejeros de educación y sanidad del PP nuestro Plan B educativo", ha tuiteado el líder del PP, Pablo Casado.

   El documento difundido por los 'populares' a través de Twitter, que abarca una página, resume que se debe garantizar una vuelta a los centros educativos y universidades, coordinada para toda España. "El Gobierno de la Nación tiene la obligación de liderar la respuesta frente a la pandemia para todo el sistema educativo nacional y no puede delegar su responsabilidad en las comunidades autónomas", señala el partido en el documento de medidas de dicho "plan B", en el que también afirma que "el refuerzo presupuestario debe beneficiar a la educación pública, concertada y especial".

   Dentro de su "plan B educativo", el PP insta en primer lugar a garantizar la salud y la protección frente a contagios de alumnos, profesores, personal de administración y servicios.

   Para ello, pide un plan de contención para cada centro educativo y cooperación ente los servicios sanitarios y educativos; un coordinador COVID en cada centro educativo, coordinando una enfermería y servicios de atención primaria; y pruebas de detección COVID a todos los profesores.

   En segundo lugar, apuesta por la presencialidad y la calidad educativa mediante: el uso de mascarillas y distancia social en aula y espacios; la reducción de grupos si fuese necesario; y el incremento de recursos humanos y dotación de materiales.

   Por último, contempla el impulso de la digitalización y garantía de derecho a la educación en caso de confinamiento, para lo que aboga por: el refuerzo de recursos tecnológicos, materiales didácticos y formación a disposición del profesorado; el apoyo de equipos informáticos para domicilios de alumnos que lo necesiten; y la potenciación del Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado (INTEF) como plataforma para la formación de docentes y materiales educativos para alumnos.