MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
Este verano, aquellos jóvenes que se incorporaron al mundo universitario en 2020 celebrarán sus graduaciones, un acto que pone el broche final a su etapa universitaria para adentrarse en el mundo laboral y explotar las aptitudes y conocimientos adquiridos durante sus estudios.
En este contexto, expertos de la Universidad Villanueva han realizado un análisis del perfil de graduado de la denominada Generación Covid, señalando las peculiaridades de esta promoción debido a las anomalías que planteó la pandemia y el confinamiento a su experiencia universitaria.
Además, los especialistas de distintas áreas de la Universidad Villanueva han planteado cómo será la incorporación de esta generación al mercado laboral, distinguiendo tanto las prioridades de estos nuevos trabajadores como la adaptación de las empresas a un nuevo perfil de talento.
El perfil de la generación de alumnos que va a graduarse este año es un perfil que, en su adolescencia, perdió años muy valiosos. La doctora en Psicología y profesora en la Universidad Villanueva Rocío García Torres asocia esta pérdida a una libertad arrebatada, la cual ha causado "que esta generación sienta una necesidad aumentada por recuperar el tiempo perdido desde el disfrute, haciendo que valoren el tiempo a corto plazo y que busquen experiencias de una forma más señalada".
Esta forma diferente de entender la vida y, en consecuencia, el trabajo, convierte a este perfil en uno que "valorará aún más la flexibilidad laboral, tanto desde la autonomía como en los horarios".
Para la directora del Grado en Administración y Dirección de Empresas en la Universidad Villanueva, Ana Molleda, "la capacidad de conciliación entre la vida personal y profesional se ha convertido en un factor clave para la atracción y fidelización de talento en las empresas, que ahora deben tener este nuevo perfil de trabajador en mente para evolucionar y adaptarse a sus nuevas prioridades".
APRENDIZAJE Y ADAPTACIÓN
La pandemia supuso un periodo de total incertidumbre en todos los puntos del mapa, siendo especialmente complejo para aquellos que emprendían nuevas etapas en su vida. Muchos alumnos se vieron obligados a iniciar sus estudios universitarios de forma remota desde un confinamiento absoluto y con la pérdida de muchos hitos asociados al momento vital de terminar la etapa escolar, cumplir la mayoría de edad y empezar sus estudios superiores.
"Los jóvenes de esta generación han aprendido a estar solos, a tenerse a sí mismos y a realizar una introspección muy profunda. La adaptación que tuvieron que llevar a cabo en un momento global caótico también ha conllevado un aprendizaje notorio en adaptación, en especial a situaciones de pausa", señala García Torres.
La profesora también recalca, entre los aspectos positivos de la experiencia vivida por la Generación Covid, que "el confinamiento ha sido pura medicina para una generación con claros problemas ante la tolerancia a la frustración, dotando a los jóvenes de resiliencia al verse obligados a generar herramientas y recursos que hasta entonces no tenían".
En definitiva, estas vivencias han capacitado a la Generación Covid con habilidades absolutamente diferenciales a otras promociones, las cuales se verán transferidas en su incorporación al mercado laboral, el cual se ve definido por un entorno en profunda transformación debido a la digitalización y la globalización.
En referencia al aprendizaje y adaptación que definen a los próximos graduados, la directora del Grado en Administración y Dirección de Empresas en la Universidad Villanueva destaca la importancia que cobran las soft skills para su futuro laboral. "Ante un entorno en constante cambio, las empresas valoran más que nunca la adaptación y la resiliencia en la captación de nuevo talento", indica.
La profesora también incide en el papel de la universidad como antesala al mundo profesional y su importante rol en la preparación de los alumnos.
"La clara apuesta que realizamos desde la Universidad Villanueva por una formación basada en valores y competencias a través de nuestras asignaturas CORE; como la habilidad de comunicación, el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la empatía. Estos soft skills, impulsados tanto por nosotros como por la experiencia de nuestros alumnos durante la pandemia, permitirán que se integren con mayor facilidad y éxito en las empresas ahora que inician esta nueva etapa", asevera.
DIGITALIZACIÓN Y PRESENCIALIDAD
La pandemia dejó las aulas vacías de un día para otro y obligó a las universidades a reinventarse y a impulsar en tiempo récord un proceso de digitalización ya en marcha.
Así lo explica el director General de la Universidad Villanueva, Pedro Irastorza, quien recuerda que su primer curso como centro privado coincidió con el inicio de la pandemia pero consiguieron "gestionarlo de manera muy satisfactoria" ya que, desde el principio, tenían "un plan estratégico en marcha y uno de los programas estrella era el de digitalización de la universidad".
"La Covid aceleró esa transformación digital. Las universidades privadas fuimos capaces de desarrollar un dispositivo tecnológico, adaptándonos a lo que ya teníamos previsto, de manera que pudimos atender en muy pocos días a todo el alumnado", afirma.
No obstante, si bien, las nuevas tecnologías y la enseñanza online han llegado para quedarse, Pedro Irastorza subraya la importancia de mantener un equilibrio entre virtualidad y presencialidad: "El reto tecnológico supone también amenazas como la deshumanización".
"Por ello, hemos de ir a un modelo híbrido en donde unamos lo mejor de ambos mundos, en un ámbito tan sensible como el educativo donde cada vez va a ser más necesaria una formación humanística, personalizada, a medida, y un acompañamiento al alumno para lo cual, la presencialidad es necesaria. Por tanto, el reto está en saber encontrar ese equilibrio y aprovechar las ventajas que sin duda tienen ambos modelos. En ello estamos trabajando en la Universidad Villanueva", agrega.
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