MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA) exigirá al nuevo ministro de Educación cuando se forme gobierno que desaparezcan los deberes escolares y se apoyará para ello en el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), según el cual, los niños españoles se encuentran entre los más presionados de Europa por estas tareas.
Para estos padres, los deberes escolares son una práctica propia "de tiempos pasados". Por ello, CEAPA pidió en la pasada legislatura comparecer en la Comisión de Educación del Congreso y del Senado, con respuesta negativa por parte de ambas cámaras, y ha vuelto a solicitarlo ahora. Asimismo, cuando se configure el nuevo gobierno, CEAPA trasladarán al nuevo ministro de Educación sus argumentos para eliminar esta práctica.
CEAPA critica las "sanciones" que se imponen a los alumnos cuando no realizan los deberes y apunta que no existe ninguna normativa vigente que valide esta actuación.
Anotaciones en la agenda, bajada de notas o comentarios en público son, según precisan, algunos de los castigos por no llevar hechos los deberes, algo que, a su juicio, genera "desigualdad" porque hay familias que "no tienen disponibilidad horaria, no tienen conocimientos o no tienen formación" para ayudar a sus hijos y tampoco tienen posibilidades económicas para pagarles clases particulares.
"Se les hace responsables (a las familias) de las bajas calificaciones de sus hijos e hijas, los cuales pasan a engrosar unas estadísticas de fracaso que casualmente está repleto en gran medida de alumnado perteneciente a un bajo nivel socio-económico y cultural", apuntan.
En este sentido, precisan que el concepto de "fracaso escolar" está "deliberadamente mal definido" ya que "no es el alumnado quien fracasa, sino el sistema educativo, que no es capaz de abordar las necesidades del alumnado trasladando la responsabilidad al propio alumno y a su familia".
Asimismo, CEAPA denuncia que existe "una presión social" tanto hacia el alumnado como hacia las familias que comunican al profesorado su posición contraria a la realización de deberes obligatorios y que optan por dedicar su tiempo libre a otro tipo de actividades exentas de contenidos curriculares.
"Son muchos los comunicados que llegan a CEAPA de familias que piden ayuda y manifiestan temor a represalias o a generar una situación que pueda incitar al acoso escolar (si se posicionan contra los deberes)", señalan.