MADRID, 12 May. (EUROPA PRESS) -
La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ha criticado que las limitaciones en el uso del dominio público hidráulico no den derecho a indemnización, lo que, a su juicio, "puede dar lugar a actuaciones arbitrarias y a expropiaciones sin procedimiento poco respetuosas con las concesiones y con el Estado de Derecho".
Así lo ha manifestado la federación en un comunicado tras el Consejo de Ministros extraordinario en el que el Gobierno aprobó 2.190 millones de euros para paliar los efectos de la sequía.
Los regantes consideran positivas algunas medidas incluidas en el decreto aprobado para hacer frente a la falta de agua, pero advierten de que las ayudas generales previstas "no son suficientes para compensar las pérdidas históricas que está sufriendo el campo, que ya superarían los 10.000 millones de euros y dejan a miles de explotaciones agrarias del país en una situación dramática".
En concreto, Fenacore valora "positivamente" las exenciones al canon de regulación y la tarifa de utilización de agua para regantes con dotaciones de recursos hídricos mermadas, así como la del IBI, tal y como ha venido reclamando desde hace meses, en el marco de su plan de medidas coyunturales y estructurales para luchar contra la sequía, presentado al Gobierno.
La federación destaca algunas actuaciones como la apertura de pozos de sequía en periodos como el actual, la puesta en marcha de obras de emergencia o la culminación del proceso de modernización de regadíos. También valora positivamente los cambios que van a impulsar la reutilización de las aguas regeneradas en condiciones de calidad y económicas adecuadas para el regadío.
En paralelo, resalta otros aspectos importantes del paquete de medidas, entre ellos, que se descongele la inversión en obras e infraestructuras hidráulicas, como defienden los agricultores de regadío desde hace años, "no sólo para mitigar las consecuencias de las inundaciones y sequías, sino también para garantizar la producción de alimentos".
En este sentido, valora que el decreto "prevé dar un impulso a nuevas infraestructuras", pero lamenta que el Gobierno, en materia de planificación hidrológica, "no haya tenido en cuenta" las aportaciones del sector del regadío, los principales usuarios, que, en su opinión, "saben mejor que nadie dónde se necesita el agua de manera urgente y cuáles deben ser las actuaciones y obras de regulación prioritarias para garantizar los riegos".
Por último, los regantes han reclamado, con motivo del comienzo de la campaña para las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo, que el agua "no se convierta en un arma arrojadiza entre partidos y que no se vuelva a convertir en un objeto de confrontación".
"Para que las medidas ayuden eficazmente a combatir la sequía, es urgente alcanzar un Pacto de Estado que refuerce la colaboración entre los sectores afectados, las administraciones públicas y los grupos parlamentarios para, a fin de cuentas, evitar la 'contaminación política del agua'", concluyen.