BRUSELAS, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha pedido a España y otros catorce países de la Unión Europea que entreguen sus programas nacionales de control de la contaminación atmosférica, que las capitales debían haber remitido a las autoridades europeas como muy tarde el pasado 1 de abril, según han explicado fuentes comunitarias.
En concreto, Bruselas envió el 10 de abril una carta a todos los países que no han comunicado sus planes pidiendo información al respecto y recordando que están obligados a hacerlo tal y como establece la directiva sobre reducción de emisiones nacionales de determinados contaminantes atmosféricos
Además de España, el Ejecutivo comunitario todavía no tiene los programas de Francia, Alemania, Polonia, Bulgaria, Chipre, República Checa, Grecia, Hungría, Lituania, Malta, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia y Luxemburgo.
Sí que los han entregado, por contra, Austria, Irlanda, Países Bajos, Croacia, Letonia, Portugal, Dinamarca, Italia, Suecia, Bélgica, Reino Unido, Estonia y Finlandia. En cualquier caso, sólo estos últimos tres países cumplieron el compromiso de enviar sus documentos antes del 1 de abril, según consta en el directorio de la Comisión Europea.
De hecho, el Ejecutivo comunitario es el encargado de examinar la coherencia de los programas nacionales con las normas europeas, incluida la trayectoria de reducción emisiones desde 2020 a 2030. Los Estados miembros, además, tendrán que actualizar sus programas nacionales como mínimo cada cuatro años.
En ellos, los países deben valorar en qué medida las fuentes de emisiones nacionales pueden tener un impacto sobre la calidad del aire en su territorio y en el de Estados miembros vecinos, además de tener en cuenta la necesidad de reducir dichas emisiones para cumplir los objetivos de calidad del aire.
Los programas de cada socio comunitario también tienen que dar prioridad a las medidas de reducción de las emisiones de carbono negro a la hora de adoptar medidas para cumplir sus compromisos nacionales de reducción de las partículas finas y garantizar la coherencia con otros planes y programas pertinentes establecidos en virtud de requisitos indicados en la legislación nacional o comunitaria.
La asociación europea de organizaciones medioambientales European Environmental Bureau (EEB) ha tildado de "sorprendente" el hecho de que más de la mitad de los países europeos no hayan remitido aún sus programas nacionales "en algo así de importante". "Cada día de retraso en atajar la contaminación atmosférica significa que más gente sufre las consecuencias en su salud", ha advertido la responsable de Calidad del Aire de EEB, Margherita Tolotto, en un comunicado.