MADRID, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
El cambio climático, los incendios forestales y la contaminación atmosférica conforman "un círculo vicioso" cuyas consecuencias negativas para la salud de las personas, los ecosistemas y la agricultura no dejan de agravarse, según el nuevo boletín sobre la calidad del aire y el clima de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el cuarto de una serie anual.
El estudio, centrado en datos de 2023, analiza la "compleja" relación entre calidad del aire y clima a través de la concentración en distintas regiones del mundo de partículas con un diámetro de 2,5 micrómetros o menos (PM2,5), cuya inhalación constituye un grave peligro para la salud y cuya presencia tiene un impacto en la agricultura; así como la influencia de los incendios forestales sobre la calidad del aire.
CONTINÚA LA TENDENCIA DE MENOS PARTÍCULAS PM2,5 EN EUROPA Y CHINA
Siempre a través del Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus (SVAC) y la Oficina de Modelización y Asimilación Globales (GMAO) de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), la OMM constató que los incendios forestales que afectaron América del Norte generaron emisiones "excepcionalmente elevadas" de particulas con un diámetro de 2,5 micrómetros o menos (PM2,5) en comparación con el período de referencia comprendido entre 2003 y 2023.
A su vez, también midió concentraciones de PM2,5 superiores a la media en la India por el aumento de las emisiones contaminantes fruto de la actividad humana e industrial. En cambio, en China y Europa se registraron niveles inferiores a la media gracias a la disminución de las emisiones antropógenas. Según la OMM, se mantiene la tendencia observada desde la publicación del primer número del boletín en 2021.
LA AGRICULTURA TAMBIÉN ES UNA FUENTE DE PARTÍCULAS
El organismo ha explicado que la propia agricultura es una fuente importante de materia particulada por la liberación de partículas y sus precursores por la quema de rastrojos, la aplicación de fertilizantes y pesticidas, la labranza, la cosecha y el almacenamiento y uso de estiércol. De hecho, ha incidido en que algunos de los puntos críticos del planeta se concentran en zonas agrícolas de África central, China, la India, el Pakistán y el sureste asiático.
Según datos recabados de experimentos llevados a cabo en China y la India, la materia particulada puede menguar el rendimiento de los cultivos hasta un 15% en zonas muy contaminadas. En el boletín, la OMM ha propuesto distintas soluciones prácticas, como la plantación de árboles o arbustos para proteger físicamente los cultivos de las fuentes locales de partículas.
LAS EMISIONES DE PARTÍCULAS MÁS ALTAS DE LOS ÚLTIMOS 20 AÑOS
Por último, el boletín de la OMM ha explicado que las temporadas de incendios forestales tanto en el hemisferio norte como en el sur fueron extremadamente activas, lo que provocó un aumento de las emisiones en diversas regiones del mundo. Así, debido a los incendios forestales de Canadá en 2023, cuyo humo atravesó el Atlántico Norte hasta llegar al sur de Groenlandia y a Europa Occidental, las emisiones totales acumuladas de materia particulada y carbono fueron muy superiores a la media anual de al menos los últimos 20 años.
Además, los autores del estudio han indicado que los valores de ozono, monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno y PM2,5 registrados por los incendios en el centro y el sur de Chile durante enero y febrero de 2023 "ponen de manifiesto la extrema degradación de la calidad del aire provocada por los intensos y persistentes incendios forestales, cuya frecuencia aumenta a medida que el clima es cada vez más cálido".
Aunque los datos que ha manejado la OMM para este boletín son de 2023, la Secretaria General Adjunta de la OMM, Ko Barrett, ha advertido que en los ocho primeros meses de 2024 se han mantenido las tendencias observadas el año anterior: calor intenso y sequías persistentes que han avivado el riesgo de incendios forestales y contaminación atmosférica. "El cambio climático y la calidad del aire no pueden tratarse por separado. Van de la mano y deben abordarse conjuntamente. Reconocer esta interrelación y actuar en consecuencia conllevaría beneficios para la salud de nuestro planeta, sus habitantes y nuestras economías"", ha afirmado.