MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
La reserva hidráulica española está al 47,9 por ciento de su capacidad total, con 26.826 hectómetros cúbicos de agua (hm3), disminuyendo en la última semana en 659 hectómetros cúbicos (el 1,2 por ciento de la capacidad total de los embalses), según datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA). Hace un año los embalses se encontraban al 64,1 por ciento de su capacidad y la media de los últimos diez años por estas fechas es del 63,3 por ciento.
Por ámbitos, las cuencas que están por debajo del 50 por ciento de su capacidad son: Segura, al 21,1%; Júcar, al 31,9%; Cuenca Mediterránea Andaluza al 41,2%; Duero, al 41,4%; Guadalquivir al 40,7%; Tajo, al 45,5%; y Guadalete-Barbate, al 46,7%.
Por encima de la mitad de su capacidad, se encuentran, Guadiana al 50,9%; Miño-Sil, al 61,1%; Ebro, al 61,7%; Galicia Costa, al 65,6%; Cuencas internas del País Vasco, al 71,4%; Cuencas internas de Cataluña al 71,8%; Cantábrico Oriental, al 75,3%; Tinto, Odiel y Piedras, al 76%; y Cantábrico Occidental, al 85%
Esta semana, las precipitaciones han sido escasas en todo el territorio nacional. La máxima se ha producido en San Sebastián-Donostia, con 11,6 mm (11,6 l / m2).
EL ABANDONO DE LOS MONTES FAVORECE LA SEQUÍA
El investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto Pirenaico de Ecología Sergio Vicente ha señalado, en declaraciones a Europa Press, que aunque las sequías en España son "recurrentes" por el propio clima Mediterráneo, "un factor determinante" que está "agravando la situación": "el incremento de la vegetación por el abandono de los montes, que substraen agua, así como las altas temperaturas, que provoca que la atmósfera demande más" este recurso.
Con estos factores, además de la influencia de la "desviación de agua" a otras zonas, Vicente ha asegurado que los modelos predictivos indican que a largo plazo España "padecerá una mayor aridez" y las sequías serán "más severas", aunque éstas "afectarán al país de forma desigual", igual que ahora.
Asimismo, ha lamentado que España "no cuenta con un sistema de seguimiento de la sequía" por lo que se debería poner en marcha un "sistema de monitorización" para que este fenómeno y sus impactos "no pillen por sorpresa".
Asimismo, Vicente ha señalado que uno de los "indicadores clave" para hablar de sequía, por su "importancia" para abastecer a determinadas zonas del Estado, son los sistemas de cabeceras del río Tajo, cuya reserva hidráulica se encuentra por debajo del 50 por ciento de su capacidad.
La ministra Isabel García Tejerina recordó la semana pasada durante su comparecencia en el Congreso que la gestión del agua es una responsabilidad compartida y advirtió de que los aportes extraordinarios de agua se van terminando. "Se les ha puesto agua a su disposición (a los regantes). Ojalá seamos capaces de mantener, insisto, en el que sería el quinto agua de sequía, esta situación, pero todo parece que este agua extraordinaria pues cada vez se va terminando", avisó.