MADRID, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las emisiones de CO2 del sector energético batieron un nuevo récord en 2022, cuando alcanzaron los 37.000 millones de toneladas, que superan en un 1 por ciento los niveles prepandemia, según ha informado este martes la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
El organismo internacional ha publicado un informe, la actualización de su hoja de ruta 'Net Zero Emmission 2050', que advierte de que los datos indican que el camino hacia el cumplimiento del Acuerdo del Clima de París de limitar la temperatura global en 1,5C "se ha estrechado" pero sigue abierto gracias a las energías renovables.
El documento refleja que pese a este nuevo récord mundial de las emisiones del sector de la energía, la AIE confía en que alcanzarán un punto máximo en esta década pero para ello, insiste, igual que hizo en su hoja de ruta de 2021, en que "no es necesario invertir en nuevo carbón, petróleo y gas natural" sino continuar con el despliegue de las principales tecnologías energéticas limpias. Sólo así espera que la demanda de los combustibles fósiles alcancen su punto máximo esta década.
Además, el informe observa una evolución positiva en el despliegue de instalaciones de energía solar fotovoltaica y las ventas de coches eléctricos, con datos que se ajustan a los hitos establecidos en el informe de 2021.
En su análisis de tendencia, la Agencia Internacional de la Energía prevé que en 2023 se invertirá a nivel global la cifra "récord" de 1,8 billones de dólares en energías limpias, cifra que deberá ascender a unos 4,5 billones de dólares anuales a principios de la década de 2030.
Además, señala que en 2030 en el escenario 'Net Zero Emmissions by 2050', el gasto energético total de los hogares habrá disminuido en un 12 por ciento respecto el nivel actual y aún más en las economías avanzadas.
Al mismo tiempo, prevé que en 2035 las emisiones deberán disminuir en un 80 por ciento en las avanzadas y un 60% en las economías de mercado emergentes y en desarrollo en comparación con el nivel de 2022.
El documento se publica unos días antes de la Cumbre Internacional de Energía y Clima que tendrá lugar el 2 de octubre en Madrid en el marco de la Presidencia Española de la Unión Europea y que han organizado la AIE y el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.
Durante la presentación del informe, el director de la AIE, Faith Birol, ha afirmado que mantener vivo el objetivo del 1,5C requiere que el mundo progrese más rápidamente. La buena noticia es que "ahora se sabe lo que es necesario y cómo hacerlo".
"Nuestra Hoja de Ruta Net Zero 2023, basado en los últimos datos y análisis, muestra el camino a seguir", ha argumentado Birol que ha añadido que el informe envía también un mensaje claro: "La cooperación internacional fuerte es crucial para el éxito. Los Gobiernos necesitan separar el clima de la geopolítica y tienen el reto al alcance de la mano".
Tras darse a conocer la actualización de la hoja de ruta de la AIE, la directora ejecutiva de la European Climate Foundation, Laurance Tubiana, ha manifestado que en vísperas de la COP28 los últimos datos científicos son "inequívocos". "La era de los combustibles fósiles está llegando a su fin. Este nuevo informe es claro: la única manera de avanzar en el sector energético es desarrollar las energías renovables, la eficiencia y la electrificación", ha defendido.
Para Tubiana la Presidencia de la COP28 de Dubai tendrá que demostrar "cómo es el liderazgo post-combustibles fósiles".
En la misma línea, la directora de Investigación de Oil Change International, Kelly Trout, destaca que el escenario 2023 Net Zero Energy 2023 reafirma una "cruda verdad". A su juicio, ha llegado el momento de una eliminación rápida, equitativa y totalmente financiada de los combustibles fósiles.
Finalmente, el responsable de políticas energéticas de BirdLife Europa y Asia Central, David Howell, ve necesaria la aceleración de la transición energética mundial y que las energías renovables se instalen lo más rápidamente posible, de forma que se proteja y restaure la biodiversidad y se respete e implique a las comunidades locales.
"Esto es esencial para que las energías renovables cuenten con el apoyo social que necesitan para sustituir a los combustibles fósiles a la velocidad requerida. También es esencial si queremos proteger los ecosistemas que la humanidad necesita, para que colectivamente sigamos teniendo la oportunidad de un futuro estable y próspero", ha subrayado.