MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Ecologistas en Acción considera que la decisión favorable del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) a renovar la autorización de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) es "muy grave" y deja "devastada" la imagen y confianza en el organismo regulador encargado de la seguridad nuclear y la protección radiológica en España.
Así, tras conocerse que el CSN ha emitido un informe favorable, por cuatro votos a favor y uno en contra, a que la planta pueda volver a operar si cumple un conjunto de condiciones, el portavoz de la campaña nuclear de Ecologistas en Acción, Francisco Castejón, ha manifestado a Europa Press la decisión es "esperada pero muy grave", ya que da la posibilidad de funcionar a una central que está "en muy malas condiciones" y que supone "un riesgo inaceptable".
Respecto al proceso de renovación de Santa María de Garoña en su conjunto, ha lamentado que para facilitar alargar la vida útil de la central más longeva de España se llegó a modificar en enero de 2014 el Reglamento de Instalaciones Nucleares y considera que el proceso ha provocado un "daño enorme" al CSN.
"Ha sido devastador para su imagen, su transparencia e independencia. La institución sale tocada", ha sentenciado Castejón que pide una "reforma en profundidad" del Consejo y, en particular de la elección de los miembros de su pleno, que en la actualidad "no son independientes y están afiliados a partidos políticos".
Además, ha recordado que la central se encuentra en la cabecera del río Ebro por lo que en su opinión un vertido o contaminación del río tendría en consecuencias económicas, sociales y ambientales "desastrosas".
Asimismo, el representante de Ecologistas en Acción advierte de que el expediente de Garoña "sienta un precedente" ya que abre las puertas a alargar la vida útil del parque nuclear español sin debate público sobre el sistema energético, sobre la seguridad, las implicaciones del funcionamiento más allá de los 40 años ni sobre los protocolos del CSN para una decisión de estas características.
Por otro lado, aunque desconoce si Garoña volverá a producir energía de nuevo o no, pero cree que "la decisión política ya está tomada" aunque después Nuclenor "no abra" ya que es consciente del riesgo económico y técnico que presenta la central.
En cuanto a la intención manifestada por el Ministerio de Energía, Industria y Agenda Digital que ha indicado que tiene previsto abrir un debate al respecto, Castejón da la bienvenida a ese debate y espera que sea "sincero" y permita elegir a la ciudadanía sobre el modelo energético que quiere para su país.
Sin embargo, considera que la discusión llega "tarde" y que se debería haber hecho de forma previa al "permiso" del CSN para renovar Garoña porque "no queda nada" para que la central nuclear de Almaraz (Cáceres), cinco veces más potente, pida también su renovación, por lo que se ha abierto la puerta a la prolongación del parque nuclear.
Del mismo modo, advierte de que la aprobación del CSN a la continuidad de Garoña abre la puerta a futuras querellas
La aprobación del CSN a la continuidad de Garoña abre la puerta a futuras querellas de Nuclenor en el caso de que el Gobierno decidiera no autorizar el funcionamiento.
A nivel técnico, el portavoz nuclear de Ecologistas desconfía de que los miembros del pleno hayan podido "conocer y comprender en profundidad" el contenido de los 167 informes sometidos a su consideración.
En definitiva, a su entender, la autorización no debería ser condicionada a que cumpla sus condiciones para que se pueda volver a poner en marcha y aconseja al CSN que debiera señalar las reparaciones necesarias y posteriormente proceder a una nueva inspección antes de informar favorablemente.
También ha añadido que en la práctica el informe favorable sienta dos precedentes graves: hace posible obtener permisos de explotación por 17 años, más allá de los 10 habituales y da por primera vez un permiso a una central para que funciones hasta los 60 años mientras que "debería estar en proceso de desmantelamiento".