MADRID, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los incendios forestales que han asolado la Península Ibérica durante este verano han disparado en un 400% los siniestros causados por el fuego, además de haber provocado la pérdida de al menos 230.000 hectáreas y numerosos daños económicos, según informa la aseguradora AXA.
Ante esta situación, AXA recuerda a los afectados que son las compañías de seguros las que gestionan directamente estos siniestros y que las indemnizaciones son compatibles con otras ayudas que pueda ofrecer el Estado, conforme a lo dispuesto en la declaración de zona
catastrófica decretadas esta semana por el Gobierno.
De este modo, la compañía ha puesto en marcha un dispositivo especial para intentar agilizar tanto la reparación como la indemnización de los siniestros. En este sentido, recomienda a los asegurados que, en caso de incendio, sigan las instrucciones de las autoridades y, en caso de desalojar la vivienda, en la medida de lo posible, hay que bajar las persianas y cerrar ventanas.
También aconseja comunicar a la compañía de seguros la ocurrencia del siniestro, además de comprobar el tipo de cobertura que tiene y recuerda que, en la medida de lo posible, es conveniente tener a mano el número de póliza y todos los justificantes de los gastos que se pudieran tener, por lo que recomienda que se guarden todos. Asimismo, señala que, cuando se pueda acceder a la vivienda, hay que comprobar los daños, realizar fotografías y elaborar un inventario de los objetos dañados o perdidos, entre otras recomendaciones.
El director de Siniestros de AXA España, Arturo López-Linares, recuerda que "es importante que las personas afectadas se comuniquen rápidamente con su compañía, documenten los daños e incluso realicen un inventario de los bienes".
Asimismo, insiste en que es "fundamental" el papel de los seguros, así como la necesidad de verificar que los capitales asegurados sean suficientes para que se puedan indemnizar los daños sufridos.