MADRID, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
Menorca y Chipre en el Mediterráneo se han unido a las regiones del Caribe y Oceanía para implantar la iniciativa de la Unión Internacional de Conservación del Mediterráneo (UICN) 'Islas libres de plásticos', por la que desarrollarán diferentes acciones pilotos en islas para reducir los residuos plásticos y sus vertidos al mar.
El proyecto 'Plastics Waste Free Islands' se presentará mañana en Menorca donde la UICN con el apoyo de la Fundación Didier, Martine Primat y la Agencia Noruega de Cooperación (NORAD) explicarán las primeras acciones piloto que pondrán en marcha.
Así, las islas elegidas en el Mediterráneo para poner en marcha esta metodología son Menorca y Chipre. En concreto, identificarán los puntos críticos de vertidos al mar para después adoptar medidas "eficaces y cuantificables" para reducir su impacto.
En concreto, el proyecto ha seleccionado tres sectores relacionados con el uso de plásticos que permitirá comparar el intercambio de mejores prácticas: turismo, pesca y gestión de residuos. El proyecto busca impulsar la economía circular y reducir la generación de residuos plásticos y sus vertidos al mar, especialmente en estos tres sectores.
El encargado de coordinar las acciones será el Centro de Cooperación del Mediterráneo de la UICN que se encargará de realizar las acciones en estas dos islas con el apoyo de un consorcio de organizaciones locales. En la isla balear, la UICN-Med colaborará con el Observatorio Socioambiental de Menorca (OBSAM).
En el evento de presentación de Menorca participará el Departamento de Medio Ambiente y Reserva de Biosfera y el Departamento de Economía y Territorio del Consell Insular de Menorca y entidades involucradas en la mejora del uso de los residuos plásticos. Estas entidades son la Fundación para la Preservación de Menorca, el Grupo Balear de Ornitología y Defensa de la Naturaleza (GOB Menorca), Asociación Per la Mar Viva, Grup d'Acció Local de Pesca de Menorca (GALP) y Red Mundial de Reservas de la Biosfera 'Islas y Zonas Costeras'.
La coordinadora del Programa Marino Mediterráneo de UICN, Marine-Aude Sevin, ha destacado que la iniciativa es ambiciosa porque busca involucrar a "una amplia gama de interesados", que incluye gobiernos, industrias y sociedad. "Confiamos en que la aplicación de una de las metodologías científicas más recientes permita trabajar con los sectores económicos clave para diseñar mejores productos y estrategias basadas en datos que impulsen un cambio transformador y reduzcan drásticamente la contaminación de plásticos en el mar", ha manifestado.
Mientras, la responsable del seguimiento del medio marino del 'OBSAM', Eva Marsinyach Perarnau, considera que el proyecto encaja "perfectamente" con la filosofía de Reserva de la Biosfera, pero además lo hace de acuerdo con los movimientos sociales, científicos y políticos que se han ido desarrollando a lo largo de los últimos años en Menorca.
"Vivimos un momento en el que la preocupación sobre el medio marino es creciente y este proyecto es una oportunidad para contribuir a su conservación, pero también para trabajar nuestra sostenibilidad", ha añadido.
Según estudios de la UICN el Mediterráneo es la sexta zona de acumulación más grande de residuos plásticos del mundo, después de los cinco giros oceánicos y se considera que es el mar más contaminado del mundo.
Debido a su carácter semicerrado, a la intensidad del transporte marítimo, a la pesca y a las actividades industriales y turísticas que concentra, el mar Mediterráneo es particularmente sensible a la contaminación de los plásticos.