MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las protectoras españolas recogieron en 2022 más de 288.000 perros y gatos (170.105 y 118.352 respectivamente), 3.000 más que el año anterior, según el estudio 'Él Nunca lo Haría' 2022 de Fundación Affinity. Esta cifra representa casi el 3% del total de animales de compañía que se estima que viven en España.
"Podemos hablar de una cierta estabilidad en las cifras de perros y gatos recogidos por las protectoras, pero sigue siendo un desafío relevante en el que las personas, entidades, profesionales y la administración pública pueden aportar soluciones", ha manifestado la directora de la Fundación Affinity, Isabel Buil.
Según se desprende del informe, las camadas no deseadas siguen siendo un año más el primer motivo de abandono (19%), seguido de los problemas de comportamiento del animal (12%), la pérdida del interés por el perro o gato (12%) y el fin de la temporada de caza (11%). Además, los problemas económicos han aumentado respecto al año anterior (pasando del 6% al 9%) igual que el cambio de vivienda que ya representa el 8% de los motivos de abandono.
En cuanto al perfil de los animales que llegan a las protectoras, varía según su especie. En el caso de los perros, más de la mitad son de edad adulta (57%), mientras que los cachorros representan un 28% y los perros de edad avanzada o sénior, un 15%.
No obstante, atendiendo solo a los gatos recogidos, casi la mitad son cachorros, concretamente un 48%. "Nos preocupa especialmente el caso de los gatos que llegan a las entidades fruto, sobre todo, de camadas no deseadas, lo que demuestra que aún queda mucho trabajo por hacer. Por ello, insistimos en el control de la reproducción como medida clave", ha indicado Buil.
Además, el estudio muestra que solo un 3% de los gatos recogidos por las protectoras lleva microchip y que muchos de ellos están heridos (15%) o enfermos (38%). Este hecho podría influir en que un 12% muera durante su estancia en el refugio, una cifra que triplica a la de perros fallecidos en la protectora, según explican los autores del informe.
Respecto a la época del año en la que se producen más abandonos, de los datos se desprende que, en el caso de los gatos, es el verano (especialmente mayo, junio y julio), mientras que la entrada de perros en los refugios es uniforme a lo largo del año.
"Tenemos medidas a nuestro alcance para reducir las cifras de abandono. La esterilización del animal es clave para prevenir las camadas no deseadas y la correcta identificación para que el perro o gato pueda ser devuelto a su familia en caso de pérdida", ha señalado Buil.
Además, ha añadido que "la ayuda profesional de un veterinario etólogo o un educador canino puede ayudar y orientar para solventar los problemas de comportamiento que puedan surgir". También insta a "realizar una reflexión previa en familia sobre las expectativas acerca de la convivencia con un animal".