Quién es Sara Aagesen, la nueva vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica

MADRID 25 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado este lunes el nombramiento de Sara Aagesen --ex secretaria de Estado de Energía-- como nueva vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Aagesen sucede a Teresa Ribera, quien asumirá la vicepresidencia ejecutiva y comisaría europea.

Nacida en Madrid en 1976, Aagesen es ingeniera química por la Universidad Complutense de Madrid, con especialidad de Medio Ambiente. Desde 2018 fue también asesora del gabinete del Ministerio para la Transición Ecológica, donde estuvo al frente de la dirección, coordinación y definición del borrador del PNIEC 2021-2030 y de la Estrategia a Largo Plazo 2050, y participó en el diseño del marco regulatorio en materia de energía.

Además, en 2002, Aagesen se incorporó a la Oficina de Cambio Climático, donde desarrolló una trayectoria vinculada a la acción por el clima y la transición energética tanto en el marco nacional como internacional.

Entre otras responsabilidades, se encargó del análisis sectorial de las emisiones y proyecciones de gases de efecto invernadero, escenarios energéticos y planificación en los distintos sectores económicos, y participó en el diseño y el desarrollo de medidas e instrumentos innovadores para la mitigación del cambio climático en España.

También ha sido negociadora para la delegación española en la Convención Marco de Naciones Unidas contra el Cambio Climático (Cmnucc) y del Grupo Intergubernamental de Expertos de Cambio Climático (IPCC).

Igualmente, ha sido miembro del Consejo Asesor del Centro y Red de Tecnología del Clima (CTCN), auspiciado por la Organización de Naciones Unidas del Medio Ambiente, y de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI), además de participar como experta nacional en diversos grupos de trabajo de la Comisión Europea y en el seguimiento y evaluación del desarrollo normativo comunitario.

En 2013 fue distinguida con la Cruz de la Orden Civil del Mérito Medioambiental, otorgada por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Su perfil técnico y "carácter dialogante" le han permitido liderar decisiones estratégicas en un periodo marcado por los impactos de la pandemia de Covid-19 y la crisis energética derivada de la guerra en Ucrania, según ha informado el Gobierno.

RETOS Y PRIORIDADES DEL NUEVO MANDATO

Al frente de la cartera de Transición Ecológica y el Reto Demográfico, uno de los principales objetivos de Aagesen será llevar a buen puerto los compromisos establecidos en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para 2030, que marcan el camino hacia una transición verde ambiciosa.

En el ámbito medioambiental, Aagesen deberá gestionar cuestiones polémicas como la propuesta de rebajar el estatus de protección del lobo, adoptada recientemente por los Estados de la Unión Europea según el Convenio de Berna. Otro desafío será decidir si implanta un sistema de depósito, devolución y retorno (SDDR) para cumplir con las metas europeas de recuperación de residuos plásticos de un solo uso. Otro de los temas que más polémica generará en los próximos meses será previsiblemente la tasa de residuos, que aparecerá de forma diferenciada en la factura a partir del 1 de enero de 2025.

En paralelo, la implementación del II Plan de Acción de Economía Circular, dotado con 2.169 millones de euros, avanzará con un enfoque en proyectos de sensibilización y participación ciudadana, que recibirán el 61,9% del presupuesto.

En el ámbito energético, Aagesen liderará el despliegue de la energía eólica marina, asegurando que se realice con cautelas ambientales para minimizar impactos negativos en la fauna y evitar conflictos con sectores afectados y comunidades costeras. También deberá avanzar en el desarrollo del cuarto ciclo de planificación hidrológica, que marcará la política del agua hasta 2035.

Por último, el sector nuclear será otro de los puntos críticos. La ministra tendrá que decidir si mantiene la hoja de ruta de cierre anticipado de las centrales nucleares o flexibiliza el calendario, al tiempo que gestiona la subida de la denominada 'Tasa Enresa'.