MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ha escrito por carta a la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, para pedirle que reduzca el impuesto sobre el valor añadido (IVA) al 10 por ciento al suministro de energía al regadío, igual que se ha hecho con el suministro doméstico, para ayudar al sector a abaratar en torno a un 30 por ciento su factura eléctrica.
Tras la prórroga del Gobierno a las medidas fiscales para reducir la factura de la luz, los regantes también quieren que esa medida se aplique al suministro de energía al regadío y, por ello, ha escrito a la ministra una misiva en la que además le solicitan la posibilidad de contratar dos potencias al año, una posibilidad recogida recientemente en la Ley para el funcionamiento de la cadena alimentaria.
En la carta, lamentan que aún no pueden disfrutar de esta doble potencia a consecuencia de la "inacción" del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), a quien incumbe el desarrollo reglamentario de esta disposición, que ya se incluyó en la Ley de la sequía de 2018 y en la enmienda aprobada en el marco de la negociación de los Presupuestos Generales del Estado de 2021.
Para los regantes estas medidas serían un "balón de oxígeno para un sector asfixiado" por las diferencias entre los costes de producción y los precios de venta y recuerdan que son el segundo consumidor de energía en España, solo por detrás de ADIF.
A modo de ejemplo, le apuntan a Montero que la normativa europea permite aplicar el IVA reducido a los suministros eléctricos y es algo que ha hecho ya Italia con los Consorcios de Bonifica en Italia (colectivos de riego similares a las comunidades de regantes españolas).
Fenacore defiende que hasta el año 2008 la mayoría de los usuarios de energía eléctrica se encontraban dentro de un sistema tarifario regulado, cuyo coste era asumible. Pero que a partir de ese año en que cambió el sistema tarifario, los regantes han ido sufriendo incrementos en los costes de la energía, hasta el punto de que en el periodo 2008-2021 la factura se ha disparado más de un 120 por ciento, lo que compromete los objetivos contraídos tanto por Agricultura como por el MITECO.
"Las Comunidades de Regantes son Corporaciones de Derecho Público que están sujetas al pago del IVA de sus suministros, pero que no pueden repercutirlo a sus comuneros, por lo que finalmente, el IVA pasa a ser un gasto que no pueden compensar y supone uno de los principales lastres para la competitividad del regadío, dificultando así el objetivo de seguir modernizando el casi millón de hectáreas aún pendientes", ha insistido el presidente de Fenacore, Andrés del Campo.