MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta tercera para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha confirmado que la XXVII Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático que se celebra en Sharm-El Sheikh, atraviesa un momento "muy sensible, muy delicado y preocupante" porque "aparentemente" lo que está proponiendo la Presidencia Egipcia de la COP27 es una reducción y ralentización de la lucha contra el cambio climático de la que "Europa no puede ser cómplice".
En declaraciones a los medios de comunicación en este primer día de prórroga de la Cumbre que se celebra a orillas del Mar Rojo, Ribera ha cargado contra la Presidencia Egipcia de la COP porque "nunca se ha dado una situación así". "Nunca nos hemos encontrado con una Presidencia que estuviera propugnando una contención del avance en la lucha contra el cambio climático", ha criticado.
No obstante, ha señalado que aún hay que confirmar los textos propuestos por la Presidencia que "no proceden", no son los que se han ido negociando y que durante la noche Egipto ha ido "enseñando en pantalla" por lo que las partes no han podido analizarlos en detalle. Por ello, confía en que sea posible que cuando "por fin" se hagan públicos los textos no sean esos "primeros flashes" que han ido compartiendo a lo largo de la madrugada de este sábado.
Ribera estima que será esta próxima noche cuando se alcance un acuerdo pero avisa de que esto dependerá de los textos concretos y las reacciones en un plenario durante la tarde o "cuánto está sesgado" el presidente de la COP "en una dirección" que puede generar una "gran dificultad" para lograr el consenso.
En todo caso, desea un "margen de duda razonable" aunque ha recordado que no es la primera vez que las cumbres del Clima atravesaron momentos "históricamente muy delicados", primero en el año 2000 en Holanda y en 2009 en Copenhague.
"Honestamente, es muy preocupante. Yo creo que Europa no puede ser cómplice de una reducción, una ralentización en la lucha contra el cambio climático, que es lo que aparentemente nos están proponiendo", ha insistido.
Muy crítica con el papel de la Presidencia de la COP, Ribera ha observado que Egipto ha preferido hacer una "lectura propia" y compartirla como si fuera la base para un resultado final y considera "muy importante" respetar que "todos" los países puedan contribuir y que el resultado sea "equilibrado".*
"Estamos en un momento de máxima tensión", ha reconocido la vicepresidenta que ha añadido que están empezando a salir "por primera vez" las propuestas de la Presidencia que tendrán que estudiar "en detalle" y, por tanto espera estar "a tiempo de llegar a un acuerdo".*
En todo caso, ha asegurado que para la UE es "fundamental" que el objetivo de contener las emisiones para que no crezca la temperatura más de 1,5C sea un objetivo alcanzable, lo cual requiere "incrementar la ambición".
DIFÍCIL DE ENTENDER UN RETROCESO
A su juicio es "muy difícil de entender" que en la COP27 los resultados estén por debajo de los de la conferencia de 2021 en Glasgow y de una trayectoria de muchos años en la que se ha reforzado la idea de que "todos" tienen que aportar sean del sector público o privado. "En estos momentos eso es lo que está en juego", ha sentenciado.
Ribera argumenta que la primera medida de solidaridad con los más vulnerables debe ser "preservar" que el riesgo no supera el 1,5C en el mundo y que el planeta no alcance los 2,8C de incremento como "todo apunta que puede ser real" a final de siglo en este momento si no se encuentran los recursos suficientes para paliar los daños del cambio climático.*
Por ello, ha reiterado que para la UE el acuerdo debe partir de la premisa "importantísima" de que ha de ser "coherente" con los objetivos del Acuerdo de París y que siga construyendo la realidad "multilateral" para que la lucha contra el cambio climático sea "eficaz".
LA UE NO ES CÓMPLICE
En resumen, ha subrayado que la UE no debe ser "cómplice" de una decisión final en la que se acepte reducir la ambición o que los países que tienen grandes emisiones no tengan por qué contribuir. "Yo creo que esto se entiende claramente. Me parece que no debemos respaldar una decisión de estas características", ha apostillado Ribera, que ha mostrado la voluntad de la UE de contribuir financieramente pero que no quiere aceptar las propuestas de "algunos" que lo que quieren "precisamente es quedar blindados para no tener que incrementar su ambición".
Respecto a los dos momentos críticos, ha recordado que en el año 2000 con Holanda en la Presidencia la complicación para hacer viable el acuerdo del Protocolo de Kioto fue "tan grande" que el presidente de la Conferencia suspendió las negociaciones y convocó una segunda parte seis meses después, cuando finalmente se alcanzó el acuerdo.*
El segundo "hito" considerado como "un fracaso notorio y conocido" que complicó seguir avanzando en la lucha contra el cambio climático fue la cita de 2009 en Copenhague, cuando se pretendía actualizar la foto de donde deben salir los esfuerzos en materia de clima que ya no se puede corresponder solamente con los países ricos del 1992 sino que los grandes países emergentes con grandes emisiones también debían contribuir.
Ribera rememora aquella negociación "extraordinariamente compleja" que acabó en un desacuerdo enorme que no fue posible solventar hasta un año después en la Cumbre de México.
De producirse un fracaso en Egipto, se debería a que "no es posible aceptar propuestas que blinden a algunos para que no tengan que contribuir a la velocidad y con la transparencia debida en este proceso de transformación del sistema financiero, que amplíe las contribuciones de solidaridad acelere el ritmo de descarbonización.