La UNESCO aprueba la incorporación de 25 nuevos sitios a la Red Mundial de Reservas de Biosfera, una de ellas en Andorra

   MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El Consejo Internacional de Coordinación del Programa de la UNESCO sobre el Hombre y la Biosfera (MAB) ha aprobado este miércoles la incorporación de 25 nuevos sitios de 18 países a la Red Mundial de Reservas de Biosfera, por lo que el número total de estas ahora asciende a 714 repartidas en 129 países de todos los continentes.

   Entre los nuevos sitios que han sido designados para formar parte de la Red figuran Ordino (Andorra), Fogo y Maio (Cabo Verde), Mwali (Comoras), Minett (Luxemburgo) y Nordeste de Tobago (Trinidad y Tobago). Estas nuevas designaciones suponen la incorporación de estos cinco país por primera vez a la Red.

   Por el contrario, cuatro estados miembros solicitaron al Consejo Internacional de Coordinación del MAB la retirada de once sitios de la Red Mundial. Australia pidió la retirada de Uluru Ayers Rock-Mount Olga, Croajingalong, Riverlan, Kosciuszko y Unnamed (Mamungari), Bulgaría por su parte pidió lo mismo para Ali Botouch, Doupki-Djindjiritza, Mantaritza y Parangalitsa. Por último, la República Democrática del Congo y México solicitaron la retirada de los sitios de Lufira y de las Islas del Golfo de California, respectivamente.

   "Ahora es la hora de la transformación. Las crisis también crean oportunidades, como la oportunidad de cambiar cómo vemos nuestras relaciones con la naturaleza, con los demás y con la Tierra. Sabemos que seguir como hasta ahora no es una opción con futuro. Precisamos una 'nueva normalidad' para la biodiversidad", ha comentado la Directora General de la UNESCO, Audrey Azoulay.

   Además de aprobar la integración de esos nuevos sitios, el Consejo también ha autorizado la ampliación o una nueva zonificación de cinco reservas ya existentes, que en la mayoría de los casos fueron acompañadas por un cambio de sus denominaciones.

   Por último, la UNESCO recalca que el objetivo de las biosferas es armonizar las actividades humanas con la preservación de la biodiversidad y el uso sostenible de los recursos naturales. Por ello, son un elemento esencial de la labor de investigación y concienciación que lleva a cabo la UNESCO para fomentar las prácticas innovadoras en materia de desarrollo sostenible y así contrarrestar la pérdida de biodiversidad, apoyando a sus Estados Miembros y a las comunidades.