MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
WWF ha manifestado su apoyo y solidaridad con Portugal ante el "terrible" incendio forestal de Pedrógrao Grande y ha advertido de que los grandes fuegos "no pueden combatirse" sino que "solo se previenen", por lo que reclama un cambio en la política de lucha contra el fuego.
Ante la "tristeza" de la organización por las víctimas y los graves daños provocados por el fuego, WWF lamenta que este "desastre" no es una casualidad sino el fruto de una "combinación letal" formada por el abandono de los montes-especialmente en el caso de plantaciones de especies "muy inflamables" como pinos o eucaliptos y los efectos del cambio climático.
La ONG recuerda que por mucho que se invierta en medios de extinción, este tipo de fuegos solo podrán evitarse si las administraciones apuestan por la prevención y recuperación del uso de los montes de forma diversa y no en monocultivos.
Para el experto en gestión forestal de WWF-Portugal, Rui Barreira, el foco de la lucha contra los incendios debe pasar del combate a la prevención, mediante una gestión forestal responsable a largo plazo, porque eso es "mucho más eficaz y barato" que financiar los "gigantescos" mecanismos de extinción de incendios de todos los años.
En la misma línea, la responsable de la campaña de incendios de WWF, Lourdes Hernández, ha reclamado una política forestal seria que identifique las zonas de alto riesgo de incendio e impulse planes de prevención específicos para estas zonas.
Además, ha advertido de que "por toda la Península Ibérica" hay zonas como Pedrógão Grande, con plantaciones forestales olvidadas, que califica de "verdaderas bombas de relojería listas para arder".
"Es urgente promover la puesta en valor del monte y una planificación territorial que acabe con paisajes tan inflamables, apostando por paisajes en mosaico, bosques autóctonos o mixtos y recuperando el uso de los montes", ha insistido.
Finalmente, la ONG confía en que esta "terrible tragedia" permita advertir de lo que depara el futuro si no se modifica la política contra incendios porque el cambio climático aumentará las temperaturas y las olas de calor serán más frecuentes e intensas, lo que favorecerá episodios de incendios catastróficos e imposibles de controlar por los medios de extinción.