MADRID, 5 Mar. (EDIZIONES) -
Los selfies son una manera de mostrarse al mundo; fotos comiendo, comprando, con amigos, en pareja, antes de dormir o recién levantado... Pero ¿sabías que un selfie puede hablar mucho de la persona que se hace autorretratos?
Hay quienes son reacios a tomar y compartir fotografías de sí mismos en las redes por miedo a parecer banal o vulnerable, pero aún así, las redes sociales están llenas de autofotos.
¿POR QUE NOS HACEMOS LOS SELFIES?: 'YO ESPEJO'
Según explica la doctora en psicología Andrea Letamendi de la Universidad de California en su blog, el 'yo espejo' es un concepto psicológico que sugiere que desarrollamos nuestra forma de vernos respecto a las opiniones y apreciaciones de los que nos rodean.
Ahora con las redes sociales, son cientos las personas con las que podemos interactuar al mismo tiempo y así estas se convierten en el mejor escaparate para mostrar cómo queremos que nos vean los demás y también saber cómo realmente nos ven a través de sus comentarios.
La psicóloga Letamendi explica que no es que los selfies sean malos, pero en muchos casos el problema surge cuando se convierten en una obsesión.
PERSONALIDAD CON RASGOS NARCISISTAS Y ANTISOCIALES
Un estudio realizado a finales de 2014 por investigadores de la Universidad Estatal de Ohio ha desvelado que los hombres que publican más selfies en sus redes sociales tienen rasgos narcisistas y antisociales.
La personalidad narcisista es aquella que se considera el centro de atención, exageran la imagen que tiene de ellos mismos y llevan al límite posible sus logros, todo ello para obtener un trato exclusivo de quienes les rodean.
No es sorprendente que aquellos hombres que se hacen más autofotos tengan una tendencia narcisista, pero este estudio es el primero que lo confirma. Según el titular de la investigación, el profesor Jesse Fox, esta característica se agrava entre los que dedican mucho tiempo a editar las fotografías antes de compartirlas.
CUANDO LA AUTOESTIMA DEPENDE DEL FÍSICO
El mismo estudio de la Universidad estadounidense muestra que los selfies están relacionados con aquellas personas que se valoran más a sí mismas por su apariencia física que por rasgos de personalidad, habilidades o logros, lo que significa, que son personas muy expuestas a las opiniones de los demás y que su estado emocional depende en gran medida del nivel de aceptación que tengan sus fotografías.