El joven, que se enfrenta a un petición de 15 años de internamiento psiquiátrico, reconoce la autoría a pesar de "no recordar" lo ocurrido
A CORUÑA, 10 May. (EUROPA PRESS) -
Un joven acusado de intentar matar a su pareja, primero asfixiándola y luego clavándole unas tijeras, en Boqueixón (A Coruña) se ha declarado culpable de los hechos, aunque ha alegado no haber sido consciente de lo que hacía por problemas mentales.
La Audiencia Provincial de A Coruña ha acogido este miércoles la primera sesión del juicio contra un hombre para quien la Fiscalía solicita 15 años de internamiento en un centro psiquiátrico, ya que entiende que en el momento de los hechos presentaba un brote psicótico.
Ante el tribunal, el acusado se ha declarado culpable de lo sucedido la noche del 20 de junio de 2015 en la vivienda propiedad de los padres de la víctima en Boqueixón. Allí, según recoge el escrito del Ministerio Público, el acusado, "con clara intención de acabar con la vida de su novia", trato primero de asfixiarla y después le clavo "en varias ocasiones" una tijeras.
"Yo no estaba bien psicológicamente", ha afirmado el procesado, que, aunque asegura "no recordar bien" lo ocurrido ese día, se considera culpable de los hechos porque en ese momento solo estaban ellos dos en la casa. "¿Quién iba a ser si no?", ha respondido el acusado a preguntas del magistrado.
El hombre, que ha alegado "tener flashes" de lo sucedido, ha asegurado que lo único que recuerda es "bajar a la cocina y ver sangre en el suelo", a continuación ayudó a la víctima a levantarse y le quitó "las tijeras". "Estaba muy nervioso", añade.
LA VÍCTIMA
Por su parte, la víctima, además de relatar los hechos, ha comentado cómo era al carácter del procesado, que sufrió un cambio muy notable unos días antes de los hechos.
"Le decía cualquier cosa y se alteraba por todo", apunta la mujer, que asegura que él era muy celoso y la vigilaba. "No me llegó a pegar, pero me insultaba", ha añadido.
La Fiscalía solicita para el procesado 15 años de internamiento en un centro psiquiátrico, mientras que la acusación particular eleva su pena hasta los 20 años de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa.