América registró una actividad excepcional de incendios forestales en 2024, según Copernicus

   La temporada de incendios forestales en Europa ha estado en niveles cercanos a los habituales

   MADRID, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -

   Norteamérica y Sudamérica sufrieron incendios forestales especialmente intensos a lo largo de 2024, según el seguimiento periódico de las emisiones de los incendios forestales del Servicio de Vigilancia de la Atmósfera de Copernicus (CAMS). Éstos afectaron sobre todo a los humedales del Pantanal, el Amazonas, Canadá y el oeste de Estados Unidos (EEUU).

   De acuerdo con el Servicio de Copernicus, la mayor parte del continente americano soportó condiciones de sequía graves, lo que aumentó la probabilidad de que se produjeran grandes incendios forestales. Mark Parrington, científico sénior en el Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus, ha añadido que los fuegos en esta región fueron los más destacados en las emisiones mundiales de incendios en 2024.

   Además, ha destacado que el tamaño de algunos alcanzó niveles históricos, de forma especial en Bolivia, el Pantanal y zonas del Amazonas. Según ha especificado, todos repercutieron en la calidad del aire a escala continental, con elevadas concentraciones en superficie de partículas y otros contaminantes que persistieron durante varias semanas.

   Por áreas, CAMS ha explicado que la región del Pantanal, la mayor zona húmeda tropical del mundo, registró una actividad de incendios forestales sin precedentes a lo largo del año que tuvo grandes consecuencias para este ecosistema. De hecho, las emisiones de carbono de incendios forestales estimadas en el estado brasileño de Mato Grosso do Sul --donde se encuentra la mayor parte de los humedales del Pantanal-- en el periodo mayo-junio fueron de 3,3 megatoneladas de carbono. Este es el nivel más alto en los 22 años del conjunto de datos de emisiones de incendios del CAMS y casi el triple del anterior máximo de emisiones para este periodo, registrado en 2009

   En conjunto, se estima que las emisiones totales de los incendios en Mato Grosso do Sul serán de 18,8 megatoneladas de carbono en todo el año, la cifra más alta del conjunto de datos de emisiones de incendios del CAMS. En comparación, durante el mismo periodo de mayo-junio, los incendios forestales en la Amazonia Legal produjeron 7,6 megatoneladas de carbono. En el conjunto del año, las emisiones totales estimadas para la Amazonia Legal son de 176,6 megatoneladas de carbono, las más altas desde 2010.

   El seguimiento periódico de las emisiones de los incendios forestales del Servicio de Copernicus ha detallado que Bolivia y Brasil siguieron experimentando una importante actividad de incendios forestales durante todo el año. En concreto, los de Bolivia fueron particularmente extremos. Allí, las emisiones anuales de carbono de los incendios forestales fueron las más altas del conjunto de datos del Sistema Mundial de Asimilación de Datos sobre Incendios (GFAS) del Servicio de Copernicus por un amplio margen.

   Debido a la intensa actividad de los incendios, algunas zonas de Bolivia y Brasil sufrieron una grave degradación de la calidad del aire durante periodos prolongados. CAMS ha incidido en que, en algunas regiones, las concentraciones de partículas finas PM2,5 superaron las directrices de calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para concentraciones medias diarias de PM2,5 de 15 microgramos por metro cúbico durante los meses de agosto, septiembre y octubre.

   Asimismo, el Servicio de Copernicus también ha detallado que la temporada de incendios forestales en México y Centroamérica, que suele darse entre marzo y mayo, también registró emisiones superiores a la media. En concreto, Nicaragua registró las mayores emisiones de carbono por incendios forestales en el conjunto de datos del CAMS para el mismo periodo.

AMPLIAS ZONAS DE CANADÁ, QUEMADAS UN AÑO MÁS

   De manera paralela, el Servicio de Copernicus ha recordado que algunas regiones de Norteamérica también experimentaron una importante actividad de incendios forestales a lo largo de 2024. Por ejemplo, amplias zonas del oeste de Canadá volvieron a verse afectadas por graves incendios tras el extraordinario número de incendios y emisiones estimadas en 2023. En mayo, se registraron importantes emisiones de incendios forestales en el noreste de la Columbia Británica, con emisiones estimadas de 13,5 megatoneladas de carbono en la provincia durante ese mes, el mayor total para un mes de mayo en esta provincia en el conjunto de datos del GFAS y tres veces superior al total de mayo de 2023.

   A lo largo del verano, los incendios forestales continuaron con gran intensidad con importantes emisiones en Alberta, los Territorios del Noroeste y Saskatchewan. Al final de la temporada habitual de incendios, Canadá había registrado las segundas mayores emisiones de carbono por incendios forestales del conjunto de datos del GFAS, muy por encima de la media y solo por debajo de los valores sin precedentes de 2023.

   Asimismo, CAMS ha informado que el estado de California (Estados Unidos) registró las emisiones de carbono más elevadas para un mes de julio y Oregón (también en EEUU), el total más alto en el periodo de junio a agosto. A pesar de ello, las emisiones de carbono en el país han sido en su conjunto ligeramente inferiores a la media de 2003-2023.

INCENDIOS EN LA MEDIA EN EUROPA Y A LA BAJA EN ASIA

   El Servicio de Copernicus también ha explicado que Europa experimentó una temporada de incendios forestales cercana a la media, con algunos episodios importantes, como los ocurridos en Portugal en septiembre, y en Macedonia del Norte, Grecia y otras zonas de Europa del Este y los Balcanes durante los meses de verano. Aún así, ha incidido en que el este de Eurasia también experimentó emisiones de incendios superiores a la media. Esto incluye el interior del Círculo Polar Ártico.

   Por último, en lo que respecta a la región de la alta Asociación de Naciones de Asia Sudoriental (ASEAN), las emisiones de incendios forestales en la mayoría de países, tradicionalmente elevadas, han mantenido una tendencia a la baja en las dos últimas décadas. En la temporada de 2024 (en concreto, de enero a mazo), han sido inferiores a la media con algunas excepciones al final de la temporada, especialmente en Myanmar y Laos. A medida que avanza el verano en el hemisferio sur, el CAMS está siguiendo de cerca de los incendios forestales en Australia.