MADRID, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 400 municipios de 9 países están comprometidos con el residuo cero que Amigos de la Tierra impulsa en España, a través de la creación del microsite Ciudades y Pueblos Residuo Cero, donde diferentes ayuntamientos pueden informarse sobre el proceso y contar con su asesoramiento técnico.
Como señala la ONG, la certificación de Ciudades y Pueblos Residuo Cero busca aumentar el número de municipios comprometidos con la conservación de los recursos naturales a través de un cambio sustancial en sus políticas de producción, consumo, reutilización y recuperación de productos, envases y materiales.
Para ello, la organización ecologista colabora con Alianza Residuo Cero. De momento ya son tres los municipios que han obtenido el sello de 'Candidatos' a la certificación y hay un cuarto, Barcelona, que está en trámite. Se trata de Formentera (Islas Baleares), El Boalo, Cerceda y Mataelpino (Madrid) y Vilasantar (Galicia), los dos últimos de la mano de Amigos de la Tierra, por lo que la organización espera que esta cifra crezca en los próximos años.
El Programa Residuo Cero en Europa está presente desde hace más de 10 años y durante esta década cerca de 400 pueblos y ciudades de 9 países diferentes están comprometidos con el mismo para desarrollar y llevar a cabo una estrategia que reduzca la producción de residuos desde su origen, demostrando la viabilidad económica y social de esta iniciativa.
En España, con el apoyo de la Academia Residuo Cero (Mission Zero Academy) creada por Zero Waste Europe para coordinar la certificación de Ciudades y Pueblos Residuo Cero en Europa, la organización ecologista asesorará a los diferentes municipios interesados para que empiecen a recorrer el camino hacia el residuo cero, un modelo flexible en su implementación a las realidades de cada territorio.
Comprometerse como municipio residuo cero conlleva apostar por políticas de reducción de residuos y de reutilización, contemplar la separación en origen de los residuos y compostar los desechos orgánicos, entre otras medidas. A su vez, implica no incinerar, no realizar vertidos al terreno, agua o aire, y proteger la salud humana y del medio ambiente.
"Lograr una transición ecológica justa, que respete los límites del planeta y los derechos humanos, requiere cambios legislativos urgentes que den un giro de 180 al actual modelo de producción y de consumo. Al tiempo que reclamamos a gobierno y actores políticos la máxima ambición en procesos como la reforma de la Ley de Residuos, Amigos de la Tierra participa en el impulso de la Certificación Ciudades y Pueblos Residuo Cero, como una herramienta que puede contribuir a este cambio de paradigma ayudando a los territorios a adaptar la visión Residuo Cero a sus diferentes realidades", ha señalado Marian Lorenzo, de Amigos de la Tierra.