ROMA 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
La audiencia preliminar por abusos sexuales contra menores en la que está imputado el prefecto de la Secretaría para la Economía de la Ciudad del Vaticano, George Pell, arranca este miércoles 29 de julio en Australia.
El responsable de Finanzas del Vaticano, el cardenal George Pell, fue imputado en su país de origen, Australia, por presuntos abusos sexuales contra menores y el Papa Francisco le concedió una excedencia para que pueda viajar a Australia y enfrentarse al proceso judicial.
Según indicó el Vaticano en un comunicado, el Papa ha sido informado por el propio cardenal australiano de su imputación y este ha decidido otorgarle este periodo de excedencia.
"Puesto al corriente de la situación, el cardenal Pell, en pleno respeto a las leyes civiles y reconociendo la importancia de participar personalmente en el proceso, de forma que pueda desarrollarse en forma justa y favorecer así la búsqueda de la verdad, ha decidido retornar a su país para afrontar las causas de las que se le acusa", señaló la Santa Sede.
Además, especificaba que "la Santa Sede ha recibido con desagrado la noticia del envío a juicio en Australia del cardenal George Pell por imputaciones referidas a hechos ocurridos hace varias décadas".
"El Santo Padre, que ha podido apreciar la honestidad del cardenal Pell durante los tres años de trabajo en la Curia Romana, le está agradecido por su colaboración y, en particular, por su enérgico empeño a favor de las reformas en el sector económico y administrativo y por su activa participación en el Consejo de Cardenales", subrayaba.
Asimismo, destacaba la "cooperación" del cardenal Pell en la lucha contra los abusos durante las últimas décadas llegando incluso a introducir, como obispo diocesano en Australia, "sistemas y procedimientos para la protección de los menores y para garantizar la asistencia a las víctimas de abusos".
"Ha condenado desde hace décadas abiertamente y repetidamente los abusos cometidos contra menores como actos inmorales e intolerables; ha cooperado en el pasado con las autoridades australianas (por ejemplo, en las declaraciones ante la Royal Commission), ha apoyado la creación de la Comisión Pontificia para la Tutela de los Menores", enumeraba el Vaticano en el comunicado.
MÁXIMO RESPETO A LA JUSTICIA AUSTRALIANA
Al mismo tiempo, la Santa Sede expresaba su "máximo respeto hacia la justicia australiana, que deberá decidir con respecto a las cuestiones suscitadas".
La policía del Estado de Victoria en Australia explicó que el cardenal, de 76 años, fue enviado a juicio por las denuncias presentadas contra él por abusos sexuales y tendrá que comparecer ante la Corte de Magistrados de Melbourne.
La inculpación de Pell se produjo en las últimas fases de una larga investigación sobre las respuestas institucionales aportadas en Australia a los supuestos abusos sexuales cometidos contra niños, ordenada por el gobierno en 2012.
El cardenal Pell había comparecido en tres ocasiones en el marco de este caso y reconoció ante la comisión de investigación que había "fallado" en su gestión de los curas pedófilos en el estado de Victoria en los años 70.
El eclesiástico fue ordenado sacerdote en Roma en 1966, antes de regresar a Australia en 1971. En 2014 fue elegido por el papa Francisco para arrojar luz y aportar transparencia a las finanzas del Vaticano.
La diócesis de Sydney (Australia) indicó también en un comunicado que Pell niega enérgicamente las acusaciones y planea regresar al país para "limpiar su nombre".
El cardenal Pell se defendió de las acusaciones y ha asegurado que es "inocente". "Los procedimiento judiciales me ofrecen ahora una oportunidad para limpiar mi nombre y luego volver aquí, a Roma para trabajar", aseguró en una breve declaración a finales de junio en la Santa Sede.