BRUSELAS, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha llamado este martes a "no dejar de luchar" por la igualdad entre mujeres y hombres y por proteger la seguridad de las mujeres y niñas, en un momento en el que los ataques contra los derechos de las mujeres "están en aumento" y la intolerancia se manifiesta tanto en la esfera pública como privada.
"No debemos y no podemos dejar de luchar por esta igualdad, por proteger la seguridad de las mujeres y niñas y por darles los medios para que puedan aprovechar plenamente su potencial", han afirmado en una declaración conjunta hasta nueve comisarios y comisarias del Ejecutivo que preside Jean-Claude Juncker.
Con motivo del Día de la Mujer que se celebra este miércoles, 8 de marzo, Bruselas ha querido subrayar el esfuerzo "sin descanso" de la Unión Europea por liderar en las últimas décadas y seguir avanzando en materia de igualdad y lucha contra la violencia de género.
"La intolerancia contra las mujeres y la misoginia se manifiestan en la esfera pública, así como en los ataques amparados por el cobarde anonimato de internet. Los ataques contra los derechos de las mujeres están en aumento", lamentan los nueve comisarios en una declaración en la que también advierten de que aún hoy hay "demasiados europeos" que ven justificación en las relaciones sexuales no consentidas.
Pese a las dificultades que encuentran las mujeres tanto en Europa como en el exterior --en donde a menudo son las víctimas más vulnerables en conflictos, crisis migratorias o pobreza--, el Ejecutivo comunitario ha subrayado que también son con frecuencia "las primeras en buscar soluciones y demostrar capacidad de adaptación en momentos de dificultad".
"En 2017, hay más mujeres que nunca en el mercado de trabajo, que se gradúan en las universidades y que participan activamente en política u ocupan puestos de responsabilidad en las empresas europeas", ha destacado Bruselas en su declaración.
Sin embargo, añade, "demasiadas mujeres, especialmente las madres de familias monoparentales, siguen teniendo dificultades para lograr su independencia económica en la Unión Europea". Las mujeres europeas tuvieron de media una tasa de ocupación del 65,5% el pasado año, una cifra récord pero aún lejos del 77% del porcentaje en el caso de los hombres.