MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
Casi el 80% de los menores de 35 años que convive en pareja tiene pensado casarse, y casi el mismo porcentaje (79%) de los que no conviven también tienen estos planes, aunque la mayoría asegura que depende de la situación económica para poder hacerlo, según un estudio de la Cátedra Amoris Laetitia, de la Universidad Pontificia Comillas, patrocinada por la Fundación Casa de la Familia y que cuenta con el apoyo de la Iglesia de Madrid.
El informe, titulado 'Nupcialidad e Itinerarios de Pareja' también revela que el 80% de las personas casadas creen que su matrimonio lo será para toda la vida. Además, un 54,3% de los encuestados creen que lo más importante para que un matrimonio se afiance es el "compromiso mutuo".
Según se desprende de los datos, el 73% de la población tiene pareja y el 72,8% considera que el tener hijos es importante a la hora de que una pareja sea como un matrimonio.
El estudio señala que las parejas de hecho registradas representan "una opción muy minoritaria" (1,6% de los encuestados) aunque el 62,2% señala que ser pareja de hecho inscrita da mayor seguridad jurídica a la pareja y facilita la relación con la Administración, las escuelas o los centros sanitarios.
Además, casi la mitad de las parejas convivenciales estables que no se registran como parejas de hecho (49,1%) no lo ven necesario. De ellas, casi 3 de cada 10 tampoco querrían casarse (31,1%), según revela el documento.
El estudio, llevado a cabo por los investigadores del Instituto Universitario de la Familia, Rosalía Mota, Fernando Vidal y Janina Hamburger, también pone de relieve que ha aumentado "notablemente" el peso de la seguridad como razón para casarse mientras que la "reputación social" se ha reducido a la mitad como motivación para contraer matrimonio.
En concreto, el informe señala que para los jóvenes, el matrimonio tiene "mayor importancia" como "una forma de mejorar la relación de pareja", perciben que casarse está "mejor valorado" y dan mayor importancia a la "dimensión celebrativa" como una motivación para contraer matrimonio.
El aspecto con el que más encuestados están de acuerdo es que el matrimonio crea un entorno más seguro para los hijos (66,1%) y supone una entrega mayor en la pareja (47%). Por otro lado, son "infrecuentes" las opiniones que afirman que el matrimonio quita libertad (18,7%) y que no añade nada a la pareja (26,6%).
En cuanto al papel de la Iglesia en el matrimonio, entre los encuestados que están casados religiosamente, se detecta una gran demanda de que la Iglesia ayude a las parejas, especialmente en sus crisis (64,5%) y en la educación (66,4%). Asimismo, un 41,9% cree que hace falta preparar mejor a la pareja.
Además, aunque el informe señala que la religiosidad como motivación para casarse "ha disminuido progresivamente", destaca un aumento de su valor entre los jóvenes menores de 35 años pues un 48,6% lo hizo por esa razón religiosa.